La alcaldesa, Miriam Andrés, criticó ayer la decisión del Ayuntamiento de Valladolid de adelantar el inicio de las fiestas de la Virgen de San Lorenzo al 30 de agosto, lo que en la práctica supondrá que se solapen con los sanantolines. «En vez de aprovechar las sinergias entre ciudades, a pisarnos lo que podamos», lamentó la regidora en su cuenta de X (antes Twitter), al igual que muchos palentinos, expresó su malestar a través de las redes sociales.
Por su parte, el concejal de Fiestas, Francisco Fernández, opinó que la decisión de Valladolid «no tiene mucho sentido» porque «molesta económicamente a las dos ciudades». «Ni los palentinos vamos a ir a Valladolid, ni los vallisoletanos vendrán a Palencia», lamentó. «Es una pena que no se aprovecha la cercanía de las dos ciudades para hablar y colaborar», añadió.
El edil de Fiestas reconoció que Palencia no ha decidido todavía cuándo celebrará sus fiestas de San Antolín y que, ahora con más motivo, convocará al Consejo de Fiestas para debatir cuándo fijar los sanantolines de 2024. «Tenemos que darle una vuelta porque si queremos coincidir lo mínimo con Valladolid tenemos que adelantar el inicio al 23 de agosto, en pleno verano», comentó.
Francisco Fernández tampoco ve viables unos sanantolines con «11 o 12 días de fiesta», así que la solución más factible será retrasar el pregón al fin de semana del 24 y 25 de agosto o, directamente, a la semana del 26 de agosto para terminar el día 2 de septiembre, día del patrono.
Cábalas que no es la primera vez que el Ayuntamiento se ve obligado a hacer porque desde hace 24 años, cuando el exalcalde vallisoletano, Javier León de la Riva, adelantó las ferias de San Mateo (21 de septiembre) a la Virgen de San Lorenzo (8 de septiembre), los festejos de Palencia y Valladolid se han solapado en varias ocasiones, casi siempre cada cinco años.
Sin ir muy lejos, en 2018 el entonces primer edil vallisoletano, Óscar Puente, optó por adelantar el inicio de las fiestas al día 31 de agosto. Y en 2013, cinco años antes, también ocurrió algo similar. Es cierto que esta circunstancia complica la confección del programa festivo, sobre todo a la hora de programar conciertos de música, llenar de atracciones el recinto ferial o la confección de los carteles de la feria taurina.
Hace cinco años, los sanantolines comenzaron el sábado, 25 de agosto, y finalizaron el 3 de septiembre.