La correosa lucha contra las listas de espera quirúrgicas en Castilla y León vuelve a obligar a la Consejería de Sanidad a sacar un Acuerdo Marco con el que apoyarse en la privada para poner freno a una de las grandes prioridades del departamento que comanda Alejandro Vázquez. Un 'macroconcierto' de cerca de 22 millones de euros para llevar a cabo más de 25.000 intervenciones quirúrgicas menores  durante cuatro años que permitirá a las gerencias de las nueve provincias acudir a la sanidad privada y dar salida a las casi 32.000 intervenciones en espera. El Acuerdo Marco con el que trabaja Sanidad está dividido en nueve lotes y abarca 21 tipos diferentes de cirugías menores de tres especialidades –cirugía general y digestiva, angiología y cirugía vascular, y cirugía urológica–, así como intervenciones de cataratas y septoplastia.

Sacyl derivará las operaciones a los centros privados que resulten adjudicatarios del 'macroconcurso', significando en algunos casos que los pacientes que acepten estas derivaciones deban desplazarse a otras comunidades para someterse a la intervención. En este plan, que la Consejería espera que comience a aplicarse el 1 de agosto, se incluyen cirugías como la reparación de hernias, la vasectomía, la ligadura de varices, la colecistectomía, las cataratas o la septoplastia, entre otras.

La medida de recurrir a la sanidad privada para domar la listas de espera se reconocen que desde Danidad que será«imprescindible» en el medio plazo. «A pesar de que en el último año se ha reducido la lista de espera, ésta sigue siendo elevada. Por ello, se prevé que en un medio plazo resulte imprescindible acudir a la Sanidad Privada para que complemente a la Sanidad Pública ante la insuficiencia de los medios propios de Sacyl para poder reducir más esta lista de espera», justifican desde el departamento que dirige Vázquez, donde recuerdan que la operaciones concertadas son una herramienta cuya aceptación es «voluntaria» por los pacientes.

El propio consejero defendió ayer los conciertos con la privada, pero aclaró que Castilla y León es la que «menos porcentaje de su gasto sanitario dedica a conciertos externos, un 2,8 por ciento, frente a una media nacional de casi el nueve. «Vamos a seguir en la línea de trabajar con todos los medios a nuestra disposición para que el ciudadano pueda tener listas de espera lo más asumibles posibles».

Tipos de operaciones

Este concierto externalizará operaciones tanto de cirugía ambulatoria –el paciente puede volver a su casa en el día–, como con hospitalización –deberá quedar ingresado en el centro–. No obstante, Sanidad apenas derivará 4.500 operaciones que requieran hospitalización, y la mayoría de las cirugías externalizadas (20.800 en cuatro años), el paciente podrá volver a su casa en el mismo día. Los pliegos del Acuerdo Marco colgados en el Portal de Contrataciones del Estado marcan una serie de pautas que tendrán que cumplir las adjudicatarias sobre plazos, medios necesarios o ubicación. Tal y como se detalla, el centro sanitario contratado por Sacyl deberá citar al paciente en el «plazo máximo» de tres días desde que la gerencia sanitaria le informe de esta operación. El texto también fija en 45 días el plazo «máximo» en el que la sanidad privada deberá haber realizado la cirugía desde que la gerencia se lo comunique. Deja claro la Consejería de Sanidad que en el caso de que existan discrepancias sobre la realización o no de una operación quirúrgica entre el facultativo de la privada y el de Sacyl, «prevalecerá el criterio» del profesional de la sanidad pública.

Hasta 250 kilómetros

Sobre dónde se realizarán las operaciones que derive Sacyl a los centros privados en virtud de este concierto, el documento solo especifica que debe estar a «menos de 250 kilómetros por carretera» de los hospitales de las gerencias de las nueve provincias. Esto deja un radio de acción que abarca una decena de comunidades autónomas a las que podrían tener que desplazarse los pacientes para someterse a las intervenciones concertadas. No obstante, Sanidad reconoce que es preferible que «en la medida de lo posible, no salga de su entorno habitual y que pueda contar con el apoyo de sus allegados», y señala que «obligar a los pacientes y a sus acompañantes a realizar grandes desplazamientos para recibir asistencia, supone añadir un importante gravamen para ellos».

En caso de discrepancia prevalecerá la opinión del Sacyl

El Acuerdo Marco publicado por la Consejería de Sanidad sentencia que en el caso de existir diferencias o discrepancias médicas entre el profesional de la sanidad privada y el de Sacyl, «prevalecera» la opinión del facultativo de la gerencia de Salud. «Se pretende satisfacer la necesidad de atender la lista de espera de los pacientes que necesitan ser intervenidos quirúrgicamente, en los casos en que, por su volumen, no sea posible realizarlo con los medios propios del Sistema Público de Salud de Castilla y León por insuficiencia de éstos, por la existencia de lista de espera quirúrgica, así como para garantizar la calidad y eficacia de la asistencia sanitaria de los pacientes a los que Sacyl tiene la obligación legal o convencional de prestar asistencia». Dentro de los pliegos también se marca en el seis por ciento el beneficio industrial que obtendrá la empresa adjudicataria por cada lote de intervenciones quirúrgicas, que rondará en total algo más de 1,1 millones de euros.