Ha pasado poco más de un año desde que la Junta de Castilla y León firmara un acuerdo que marcaría un antes y un después para Palencia: el inicio de las obras del nuevo hospital Río Carrión, con una inversión de 5,7 millones de euros para llevar a cabo la construcción de uno de sus grandes avances: la edificación que albergará la Unidad Satélite de Radioterapia. Este dispondrá de la mejor tecnología para el tratamiento de los pacientes oncológicos, quienes recibirán una atención más cercana y humana al evitar los desplazamientos a otros centros hospitalarios de la comunidad.
Este nuevo edificio será una infraestructura independiente, con casi 700 metros útiles, distribuidos en tres bloques conectados entre sí. Es más, tendrá dos búnkeres y unas instalaciones accesibles, modernas, confortables y tecnológicamente avanzadas.
No se puede dejar de mencionar que uno de sus objetivos es establecer un orden en la distribución para aportar mayor funcionalidad. De ahí que se distribuya en las áreas de consultas, de planificación, de simulación, de tratamiento y de apoyo y servicios; todo ello pensado para dar comodidad tanto a los pacientes como al personal sanitario que debe desempeñar sus labores a diario.
Pero la inversión no se reduce a esta acción, sino que contará con la puesta en marcha de un bloque técnico en el que se invertirán 67,5 millones de euros. Una actuación incluida en la programación plurianual de la Dirección General de Infraestructuras y Tecnologías de la Información en materia de infraestructuras sanitarias de atención especializada de la Gerencia Regional de Salud. Y cuyos trabajos de construcción están previstos en el Plan de Inversiones Sociales Prioritarias 2021-2025, aprobado por la institución regional.
El plazo para su finalización es de 30 meses y en esta primera fase se levantan 24.128 metros cuadrados, divididos a su vez en cuatro plantas que pronto se convertirán en el corazón del nuevo complejo asistencial. Y es que será aquí donde se encuentren en el futuro los laboratorios, la farmacia, los almacenes, el área de anatomía patológica, los servicios de urgencias, UCI, diagnóstico, el bloque quirúrgico y reanimación, el hospital de día médico quirúrgico, los servicios de digestivo y neumología y el bloque obstétrico.
El plan de mejora y modernización de los servicios sanitarios continúa, además, con una inversión de más de 3,4 millones de euros destinada a renovar y mejorar el equipamiento clínico y tecnológico del Complejo Asistencial Universitario de Palencia, para el que la Gerencia de Asistencia Sanitaria ha tramitado la adquisición de 15 nuevos equipos para el Hospital Río Carrión y el Hospital San Telmo que incorporan tecnología de última generación y permiten obtener un mejor diagnóstico y tratamiento de diferentes patologías.
Esto ha permitido, por ejemplo, la adquisición de un equipo de ecografía por técnica de FibroScan para la unidad de Aparato Digestivo y el servicio de Medicina Interna del Caupa, que permite el diagnóstico y seguimiento de enfermedades hepáticas mediante una técnica no invasiva; de un nuevo sistema de esterilización en autoclave para el servicio de Medicina Preventiva, dos ecógrafos para las consultas de Oftalmología en el Hospital San Telmo, un respirador portátil para la Unidad de Cuidados Intensivos y un monitor de bioimpedancia para Nefrología.
Sin olvidar la adquisición de un micrótomo y un escáner de alta tecnología para Anatomía Patológica y la renovación de las lavadoras utilizadas para endoscopias, en Digestivo. A los que se sumarán elementos para el equipamiento quirúrgico de Traumatología, como una torre de artroscopia, una mesa quirúrgica y dos motores quirúrgicos, el equipo de cirugía robótica, que cubre las necesidades de muchas especialidades, principalmente de Urología, Ginecología y de Cirugía General.
Mejoras para el servicio de urgencias
El Servicio de Urgencias del Caupa aumenta su capacidad asistencial con una nueva sala de observación para 8 pacientes, con lo que incrementa a 28 el número de puestos de observación y a 10 boxes. Esto permite dar una solución óptima a la actual demanda asistencial, y dotar de una sala blanca en Farmacia para garantizar las máximas condiciones de seguridad y calidad en la preparación de medicamentos.
Gracias a una importante actuación, a la que se han destinado 976.403 euros, se han desarrollado actuaciones para convertir la antigua sala de espera de pacientes en una amplia y moderna sala de observación de más de 80 metros cuadrados. Un espacio con ocho puestos con monitorización para pacientes agudos, dos de ellos en salas completamente independientes con diferentes sistemas de ventilación para aislamiento en caso de ser necesario, atendiendo a la sintomatología respiratoria del paciente.
La sala blanca de Farmacia también está operativa tras la actualización que ha sufrido gracias a una inversión de 693.293 euros. Gracias a ello, este espacio dispone de una nueva y moderna infraestructura sanitaria que permite cumplir las máximas medidas de seguridad y calidad tanto para el paciente como para el personal sanitario.
De hecho, garantiza que la preparación y manejo de medicamentos se realiza en una atmósfera exenta de partículas, cumpliendo la misma normativa exigida para los laboratorios de la industria farmacéutica, muy rigurosa en las condiciones de higiene y asepsia.