Apeafa organiza una campaña de apoyo al Alzheimer

Julia Rodríguez
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Esta iniciativa no solo busca ofrecer apoyo a las personas afectadas por la enfermedad, sino también sensibilizar a la comunidad y eliminar el estigma que aún pesa sobre el Alzheimer

Apeafa organiza una campaña de apoyo al Alzheimer - Foto: Sara Muniosguren

La Asociación de Personas con Alzheimer de Palencia (Apeafa) ha encontrado un nuevo hogar provisional, en la Estación de Autobuses gracias a la solidaridad de empresarios, autónomos y comerciantes locales que han donado el material y los recursos necesarios para su rehabilitación. «A pesar de los obstáculos burocráticos que están retrasando la instalación de su sede definitiva en el Parque del Salón», la asociación continúa su labor con un fuerte compromiso social y una visibilidad creciente.

Mari Ángeles Cembrero, presidenta de Apeafa, explica con emoción cómo se ha gestado esta campaña, que busca no solo ofrecer apoyo a las personas afectadas por esta enfermedad, sino también sensibilizar a la comunidad y eliminar el estigma que aún pesa sobre el Alzheimer. 

El nuevo local ha sido adecuadamente acondicionado. «Nos han pintado el espacio, nos han ayudado a montar el cartel grande que pone Alzheimer, y nos han regalado una pegatina para dar visibilidad a nuestra causa. Así, ya podemos tener un sitio  para atender a los afectados y a los que necesiten cualquier tipo de información», señala la presidenta, quien reconoce que la acogida de los palentinos ha sido «fantástica».

El objetivo principal es visibilizar la enfermedad y luchar contra el estigma que aún la rodea. Cembrero subraya que muchas familias prefieren mantener en secreto el diagnóstico de Alzheimer debido a la vergüenza o el miedo a la discriminación. «Queremos que las familias no se sientan solas, que sepan que pueden contar con apoyo, que no hay nada de lo que avergonzarse», explica.

Además, la asociación apuesta por la prevención. «Sabemos que uno de cada tres casos de Alzheimer se podría prevenir si se detectara a tiempo. Por eso, no solo estamos trabajando para apoyar a quienes ya están afectados, sino también para dar a conocer formas de prevenir la enfermedad», declara. La campaña de concienciación no se limita al presente, sino que es un compromiso a largo plazo: «Cada mes vamos a lanzar una nueva campaña de información y sensibilización».

Apeafa  lleva cinco años funcionando y ha trabajado intensamente en la investigación sobre la enfermedad, aprendiendo de expertos y asistiendo a congresos internacionales. La sorpresa de Cembrero es que mucho de lo aprendido en esos foros no se pone en práctica en España. Por eso, han decidido implementar directamente los conocimientos adquiridos para mejorar la calidad de vida de los pacientes.

Uno de los proyectos más ambiciosos es la implementación de un innovador tratamiento que ya se utiliza en otros países europeos como Francia, Italia y Holanda. Este método, avalado científicamente, busca ralentizar el avance del Alzheimer y mantener la autonomía de los pacientes hasta en las fases más avanzadas de la enfermedad. «Hemos visto cómo pacientes que llevaban años diagnosticados pueden recuperar cierto grado de autonomía. Queremos traer este método a España y ponerlo al alcance de los palentinos», asegura Cembrero.

Una de las características que hace única a esta campaña es que ha sido impulsada por la comunidad local. «Es algo que hemos hecho los palentinos para los palentinos, sin ellos no habría sido posible», destaca.

Mari Ángeles Cembrero relata cómo su vida diaria se entrelaza con las dificultades de quienes viven con la enfermedad. A través de relatos cotidianos de personas como Marcos, su marido, un hombre que lucha por mantener su independencia, Cembrero nos ofrece una visión de los retos y las soluciones que pueden mejorar la calidad de vida de los afectados y sus familias. 

Ejemplos. «La enfermedad les hace perder esa capacidad de orientación que todos damos por sentada. Un cambio en el entorno, como la colocación de una grúa o una nueva construcción, puede desorientarlos por completo», continúa la presidenta de la asociación. La solución, según Cembrero, radica en crear una ciudad más accesible para las personas con demencia, donde los puntos de referencia sean visibles y funcionales para ellos.

Innovación. Otro de los desafíos para las personas con Alzheimer es la comunicación. Cuando Marcos va de compras, a menudo no sabe cómo describir lo que necesita, y la interacción con el vendedor o dependiente puede volverse compleja. «Es importante que se les trate con paciencia, con frases cortas y claras. Si le preguntas muchas cosas a la vez, la situación se vuelve confusa y estresante para ellos», explica Cembrero.

Parte del trabajo de la asociación también se enfoca en cambiar la percepción pública sobre el Alzheimer. «Queremos que la sociedad entienda que las personas con Alzheimer no son incapaces, sino que tienen un conjunto de dificultades que, con la adaptación adecuada, pueden superar», declara. Esto no solo involucra la sensibilización de los comerciantes y los trabajadores de servicios, sino también un cambio cultural más profundo, donde el estigma asociado con la enfermedad se pueda reducir significativamente.

Además, la asociación trabaja en promover un enfoque más humanizado y normalizado para vivir con Alzheimer. Según la presidenta, «el objetivo no es aislar a las personas diagnosticadas, sino integrarles en la sociedad, brindándoles un entorno donde puedan llevar una vida activa y participativa, similar a la de cualquier otra persona y siendo más autónomos». 

También presenta una innovadora pulsera diseñada para facilitar la atención a personas con Alzheimer y mejorar su calidad de vida. «Esta pulsera, que lleva un código QR, contiene toda la información relevante sobre la persona, desde su diagnóstico hasta detalles médicos como vacunas y patologías asociadas. En situaciones de emergencia, como cuando una persona se encuentra desorientada en la vía pública, la pulsera puede proporcionar información vital de forma rápida y discreta», añade.

No solo sirve como un identificador, sino como una herramienta para los profesionales de la salud. «Así los médicos pueden saber el tratamiento del paciente, las vacunas o las recetas», concluye.