ElAyuntamiento inició a mediados de diciembre la poda de los árboles de la ciudad, una tarea que habitualmente se ha llevado a cabo a finales de otoño pero que este año se ha retrasado por un motivo, este año desde el Servicio de Medio Ambiente se ha decidido poner en marcha una experiencia piloto para defender al árbol del ataque del oídio. El Microsphaera platani es un hongo, un parásito, que causa una de las enfermedades más importantes que afectan al plátano de sombra (Platanus x hispanica), el árbol que más abunda en la ciudad, presente en prácticamente todas las avenidas, calles principales y plazas. «Este hongo es el causante de esa capa blanquecina que cubre las hojas durante el verano y que causa que los árboles se debiliten y crezcan con menos vigor, dándoles un aspecto muy feo», explica el edil de Medio Ambiente, Antonio Casas.
Durante los últimos años, la estrategia que ha seguido el Ayuntamiento es la de combinar podas agresivas durante la parte final del otoño con tratamientos con sustancias ecológicas. La última, por ejemplo, consistió en rociar los árboles de las varias avenidas y plazas durante la madrugada con una sustancia fungicida basada en un granulado de azufre, un producto no tóxico y apto para su uso en agricultura ecológica.
«Este año se ha retrasado la poda a los meses de diciembre y enero para hacerla coincidir con el frío y la parada vegetativa de las especies, minimizando así los daños que se puedan ocasionar. En algunos árboles de esta especie, se podarán únicamente los brotes débiles, haciendo una limpieza al árbol y dejando los brotes más fuertes para que los árboles crezcan con más vigor», detalla Antonio Casas, que señala que de esta forma, según le han explicado los técnicos de Jardines, «no se produce daño como las podas habituales de ramas, donde el árbol tarda más en crecer debido a que tiene que buscar las yemas durmientes».
«Esta decisión se ha tomado para intentar que el árbol, en primavera, aumente su vigor y con ello minimizar los daños que produce esa enfermedad. De hecho, habrá que realizar una poda de mantenimiento de algunos brotes para producir una aireación dentro del árbol e intentar que el oídio no se desarrolle», añade.
Junto a esta poda preventiva del oídio, el Ayuntamiento también va a llevar a cabo el desmoche de las ramas de aquellos árboles en los que suponga un riesgo para la ciudadanía, centrándose sobre todo en aquellas especies que linden con edificios y viviendas y que puedan ocasionar desperfectos.
«En la avenida de Santiago Amón, en la plaza de San José o en la zona del barrio de María Cristina más cercana al Salón hay árboles cuyas copas están muy cerca de las ventanas de viviendas o que invaden tejados y molestan. Vamos a rebajar las copas de estos árboles», detalla Casas, que avanza, además, que se está ultimando el informe sobre el arbolado del parque de los Jardinillos, donde se actuará este año para sanear aquellos árboles que supongan un peligro para la ciudadanía.