Recuperar para un uso lúdico los cerca de 45 kilómetros del trazado de los Secundarios de Castilla que unían la capital palentina de la localidad de Villalón es un proyecto del que se viene hablando desde hace años, pero que por ahora sigue sin prender. Y mucho menos ahora, con la situación económica estatal y de los municipios por los que transitaba.
Los 43 años que han pasado desde que se apagaran los hogares de las calderas de las últimas máquinas que tiraban del Tren Burra y se arrastraban por Tierra de Campos han hecho la infraestructura se haya deteriorado hasta tal punto que sería necesaria una importante inversión hasta para hacerla transitable por simples bicicletas. Para hacerse una idea, contaba con 26 puentes, dos viaductos, y cuatro pontones, todos prácticamente hechos historia.
En los años 90 del siglo pasado, la idea de convertir el trazado en vía verde comenzó a fraguar, aunque finalmente, el entusiasmo inicial se olvidó. A finales del siglo pasado la Asociación Destino Campos volvió a probar suerte, con el mismo resultado.
El último intento data de hace apenas tres años. De hecho, aún hay algún rescoldo, aunque tan débil que apenas se puede tener en cuenta.
En 2009 el trazado de los Secundarios de Castilla parecía que volvía a encender su caldera. El Ayuntamiento de la capital firmó un convenio con FEVE, propietaria de los terrenos, para la cesión del suelo del que la empresa pública disponía en la capital. Tres parcelas de un total de 53.238 metros cuadrados situadas entre la ribera del río Carrión y el inicio del término municipal de Grijota, más o menos seis kilómetros del antiguo trazado de los Ferrocarriles Secundarios de Castilla. El precio, 900 euros al año.
El presidente de FEVE, Ángel Villalba, y el alcalde de Palencia, Heliodoro Gallego, firmaron entonces el convenio con el que se quería poner la primera traviesa de la creación de una vía verde que soportará fines lúdicos, deportivos, culturales y medioambientales.
Heliodoro Gallego hablaba de encabezar el desarrollo por los municipios de esta vía verde de unos 30 km. Sin embargo, miraba al Ministerio de Medio Ambiente para que costeara el 100%. Hoy por hoy, es complicado pensar que el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente esté dispuesto a poner un euro.
En ese 2009, otros municipios se interesaron por el proyecto, con la intención de dinamizar la zona, pero al final, cada uno fue por su cuenta, y las negociaciones se rompieron. El último intento llegó hace un año, cuando de nuevo se unieron los municipios de Tierra de Campos para hace que el proyecto fuera financiado con la aplicación de la Ley de Desarrollo Sostenible del Medio Rural. Nunca más se supo. Lo único que se ha conseguido, es la recuperación de algunos inmuebles.
Por otro lado, desde el Ayuntamiento de Palencia, han apuntado esta semana que este proyecto está ahora mismo aparcado en vía muerta, debido a que se deben priorizar otras iniciativas, lo que deja a la revitalización del ferrocarril que hoy cumple, que no celebra, 100 años de su inauguración con un escenario tan desolador como el que ha vivido los últimos 43 años. Abandonado por todos, salvo por el recuerdo y la historia.