Telefónica y los sindicatos han firmado este pasado miércoles un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que prevé hasta 3.421 bajas en la compañía, -sumando también los incluidos dentro de filiales como Telefónica de España, Móviles y Soluciones-, muchas de las cuales se espera que sean voluntarias, así como un nuevo convenio colectivo que reducirá la jornada laboral a 36 horas.
Las tres principales fuerzas sindicales representadas -UGT, CCOO y Sumamos Fetico- respaldaron los términos del acuerdo al que se llegó a finales de diciembre, tras varias semanas de negociaciones en las que la compañía ha aceptado reducir en más de 1.700 los afectados por el Expediente de Regulación de Empleo. Desde el próximo lunes, hasta el 9 de febrero, los empleados que cumplan 56 años o más durante 2024 y tengan una antigüedad superior a 15 años podrán adherirse al ERE de manera voluntaria. Tras ese período, la compañía tendrá la opción de completar el cupo con bajas forzosas.
En cuanto a su incidencia en la provincia de Palencia, David Gómez, del sector de Comunicación del sindicato UGT, informó a Diario Palentino que hay 26 empleados adscritos a Telefónica, aunque ninguno de Telefónica Móviles ni Telefónica Soluciones.
De esos 26 empleados, quince sería el numero máximo de operarios «que encajan en las características del ERE, aunque no se sabrá algo definitivo hasta el 15 de febrero, que será cuando se tengan datos fijos», apuntó al respecto David Gómez. «Palencia es una de las provincias más envejecidas de España proporcionalmente respecto a empleados de Telefónica», añadió. Indica que el gasto del plan se estima en una provisión de 1.300 millones de euros antes de impuestos, sin impacto en caja. «Los ahorros anuales promedio de gastos directos se situarán en torno a los 285 millones a partir de 2025 y, en cualquier caso, el impacto en generación de caja será positivo desde 2024», agrega.
Fuentes sindicales consideran que las condiciones pactadas son suficientemente beneficiosas para que muchos trabajadores decidan acogerse al plan. Los términos para los empleados que se desvincularán de la firma mejoraron durante el diálogo entre sindicatos y empresa, hasta situarse en niveles análogos a los del plan de bajas que se aplicó en 2021.
El ERE define tres tramos de edad: El primero de ellos para los trabajadores nacidos en 1968 (en torno a 56 años), que recibirán un 68 % del salario hasta los 63 años y un 38 % hasta los 65.
Aquellos nacidos entre 1967 y 1964 percibirán un 62% del salario regulador hasta los 63 años y un 34% hasta los 65, mientras que los nacidos en 1963 o antes recibirán un 52% hasta los 63 y un 35 % hasta los 65. En estos dos últimos grupos de edad, la compañía también pagará una prima de voluntariedad de 10.000 euros. Además, la empresa ofrecerá reversibilidad de rentas, abonará el descuento de la seguridad social durante el paro y pagará el seguro colectivo hasta los 63 años, entre otras condiciones complementarias.