Julio Echazarra será el candidato del PCAS (Partido Castellano) a la Alcaldía de la capital palentina. En su discurso dejó claro que su partido «a diferencia de los que han gobernado en Palencia  hasta ahora, no es una sucursal de Valladolid, Madrid o Barcelona», y que por eso no tiene que «pedir permiso» para reclamar aspectos que considera necesarios para Palencia.

Echazarra, nacido en Palencia en 1976, licenciado en Historia, diplomado en Biblioteconomía y funcionario de la Junta, hizo una somera presentación de las líneas básicas de su partido para Palencia, basado en las infraetructuras y la cultura.

En el primer aspecto, reclama una parada en la Línea de Alta Velocidad Madrid-País Vasco y la construcción de dos autovías como son la Palencia-Aranda y la Palencia-Sahagún, para «tener conectadas las localidade de más de 20.000 habitantes por autovía así como la finalización de la A-65 (Palencia-Benavente).

Asimismo, el candidato del Partido Castellano ha reclamado el aprovechamiento de la potencialidad cultural en torno al monumento del Cristo del Otero y la explotación de la Lengua Castellana, «poniendo en marcha cursos de castellano para extranjeros en colaboración con la Junta de Castilla y León y la Universidad de Valladolid». También ha defendido la creación de un observatorio anticorrupción que fiscalice entre otras cosas el coste de los viajes de los cargos públicos del municipio.

Respecto a los posibles resultados, consideró que es complicado que PCAS saque representación. Para ello debería duplicar el techo de votos de PCAS-Tierra Comunera en la capital, con un millar de votos y un 2,5% de los sufragios.  «Es factible, sobre todo en una época de descontento como en la que estamos».