El cereal es, de largo, el cultivo preponderante en la provincia, donde la agricultura se mantiene como uno de los grandes motores socioeconómicos del medio rural y un gran generador de empleo en los pueblos. Al menos, así lo atestiguan las solicitudes a la Política Agraria Común (PAC) registradas este año en la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León.

Como muestra, de las 532.342 hectáreas totales de PAC en Palencia, más de la mitad corresponden a este cultivo. En concreto, la cifra global se eleva a las 269.398 hectáreas, divididas en trigo (121.245 hectáreas), cebada (98.550) avena (29.442), centeno (15.454) y otros cereales, que suman 4.707 hectáreas de terreno a lo largo y ancho de la geografía provincial.

El peso del cereal es tal que Palencia es la tercera provincia de Castilla y León en este cultivo, tan solo por detrás de Burgos (340.259 hectáreas) y Valladolid (295.749). Cereal al margen, destacan especialmente las leguminosas y proteginosas para el consumo animal, de la que Palencia es líder con 68.682 hectáreas. En el lado opuesto de la balanza se sitúa el lúpulo, sin una sola hectárea en tierras palentinas, o los cultivos leñosos, con tan solo 437.

Abriendo más el foco y centrando la mirada en el conjunto de Castilla y León, en toda la comunidad se incluyen en la PAC 5.273.952 hectáreas. Palencia es, en términos abslutos, la sexta provincia castellana y leonesa que más  superficie aporta al programa comunitario por detrás de Salamanca (944.546), Burgos (722.530), León (622.866), Valladolid (570.700) y Zamora (546.664).

UN 3,6% MENOS

Este desglose coresponde a las 5.661 solicitudes únicas de ayudas de la Política Agrícola Común (PAC) registradas en la administración autonómica por parte de los profesionales del sector agropecuario palentinos desde que se abrió el plazo de peticiones el pasado 1 de febrero hasta el 17 de junio, cuando se cerró el plazo de posibles modificaciones.

El número de solicitudes global ha sufrido una disminución de en torno al 3,6 por ciento en la provincia respecto al año 2023, cuando se anotaron 5.871. Sin embargo, según apuntan desde la Consejería de Agricultura, aunque la limitación de los importes ya se puede considerar descontada, el aumento de las exigencias derivadas de una mayor profesionalización del sector       -especialmente en cuanto a la adquisición y manipulación de fitosanitarios-, así como el seguimiento de los planes de abonado, ha provocado la desaparición de ciertas explotaciones de menor profesionalización, cuya superficie ha pasado a englobar otras ya existentes, pues la superficie de cultivo, de una forma global, se mantiene.

El objetivo es efectuar los anticipos de las ayudas en el primer día hábil que se autorice por la Comisión Europea (a partir del 16 de octubre), así como alcanzar una ejecución de pagos en el mismo año de la solicitud del 95 por ciento. Además, como dato a tener en cuentra, todas ellas se registraron de forma telemática de tal forma que se reduce de forma significativa el uso de papel. 

Finalmente, cabe señalar que aunque se trata de un modelo de seguimiento continuo, en los próximos días comenzará la difusión de la información de los recintos con discrepancias del control por monitorización, basado en la obtención de imágenes de los satélites Sentinel.