Contemplar la inmensidad de Tierra de Campos a través de una cámara oscura desde un mirador ubicado a más de 40 metros de altura. Este es el proyecto que tiene entre manos el Ayuntamiento de Autillo de Campos, que trabaja en la musealización de la torre de la iglesia de Santa Eufemia, que el Obispado ha cedido al Consistorio por un período inicial de 25 años.
La iniciativa contempla diferentes salas temáticas en cada una de las alturas del inmueble, de modo que el turista pueda acceder a información sobre el pueblo y su entorno más inmediato a medida que va aproximándose a la parte más alta, ubicada a 42 metros. Así, una de las plantas estaría dedicada a la comarca a modo de centro de interpretación, en una segunda el hilo conductor sería la historia local y en la tercera el viajero tendría la oportunidad de interactuar con las campanas del edificio, que tiene la particularidad de que es exento.
Finalmente ascendería a la cuarta y última planta, donde se ubicaría el elemento estrella: una cámara oscura que transformará el edificio en una torre periscópica que permitirá una visión en 360 grados gracias a un sistema de espejos que se proyectan en el interior en un gran receptor. Allí se ofrecerá una impresionante vista de un radio de 30 kilómetros, que incluye 28 pueblos (algunos incluso de la vecina provincia de Valladolid como Medina de Rioseco), palomares y el contraste propio de las tierras de cultivo. Además, y como punto de partida, también se adecentarán las escaleras de acceso, para garantizar la seguridad de los visitantes.
Se trata de una iniciativa pionera en la provincia que el alcalde del municipio autillano, Ángel Castro, califica como un «proyecto innovador» que supondrá un «empujón» para la promoción turística de toda la comarca al apostar por un «recurso diferenciador» con el que se pretende captar la atención del viajero que apuesta por destinos de interior alejados de la oferta de sol y playa. No solo eso, pretende que también los propios palentinos se acerquen hasta la futura dotación.
El Ayuntamiento busca ahora la financiación necesaria para llevar a buen puerto el proyecto, valorado en unos 350.000 euros. Así, está a la espera de la inminente resolución de una convocatoria de la Junta de Castilla y León y ha llamado también a la puerta de la Diputación y del director general de Patrimonio en busca de colaboración económica. «Es un proyecto de mandato. Cuando nos presentamos en estas últimas elecciones municipales de 2023 se propuso esta idea y se está trabajando desde el primer día en conseguirla», explica a Diario Palentino Castro, quien confía en recibir «buenas noticias» antes de que acabe el año «para que el proyecto vea la luz cuanto antes».
UNIÓN INTERMUNICIPAL
En tanto en cuanto la torre periscópica va tomando forma, Autillo de Campos trabaja en la constitución de una nueva asociación intermunicipal que conecte los pueblos de Tierra de Campos para la promoción conjunta de los recursos y riquezas que atesora este rincón de la provincia. A la misma se sumarán, además del propio Autillo, Frechilla, Mazuecos de Valdeginate, Boadilla de Rioseco, Castromocho, Capillas, Guaza, Abarca, Boada y Meneses de Campos.
«Trabajaríamos todos juntos por el beneficio común, como ya ocurre con el Museo Territorial Campos del Renacimiento», asevera Castro, quien asegura que lo que se persigue con esta acción es darse a conocer entre el gran público. Y es que, según pone de manifiesto, «no es solo beneficioso para cada uno de los municipios por separado, sino que repercute tanto en el bien común de todos ellos como en el de los vecinos que en ellos habitan».
Así, cada uno de estos pueblos tendrá la oportunidad de vender los atractivos turísticos, históricos, culturales o naturales en los que quiera poner especial énfasis. Por ejemplo, en el caso de Autillo estaría vinculado al patrimonio en un pueblo donde se proclamó en junio de 1217 a Fernando III rey de Castilla, tan solo un par de semanas antes de su coronación solemne en Valladolid entre el 2 y 3 de julio de ese mismo año.
Además, se pondría el foco en el patrimonio que alberga la propia iglesia (siglo XVI), como son el órgano de estilo barroco sobre un mueble neoclásico de 1827 obra de Ramón Guerra (último discípulo del reputado organero Tadeo Ortega), el gran retablo mayor de Pedro Bahamonde fechado en 1732, una pintura del Crucificado de fines del siglo XVI, una escultura de San Antonio de Padua de mediados del siglo XVIII, una tabla de predicación del Bautista ante Herodes relacionada con el maestro de Becerril y, la que puede considerarse el gran tesoro del templo, una pintura de la Transfiguración del Señor, copia de Rafael, de fines del siglo XVI.
«En Autillo tenemos un bar y si queremos que siga abierto, hay que tomar un café en ellos o comer. Por eso apostamos por la torre como un nuevo reclamo turístico que atraiga gente al pueblo, como ya lo hace la recién estrenada área de autocaravanas», asevera el primer edil en declaraciones a este periódico.