Laura González Fuerte, profesora de Biología, llevaba preparándose las oposiciones desde 2018, cuando se presentó la primera vez, y no ha sido hasta el año que acaba de finalizar cuando consiguió sacar la plaza obteniendo un diez en la parte de desarrollo de tema y otro en la parte practica. «Es difícil sacarse las oposiciones, pero todavía lo es más, y encima poco común, conseguirlo sacando dos dieces», asegura González. Estas notas, sumándolas a los puntos de experiencia de trabajo, hicieron que la palentina acabase primera en las puntuaciones de toda Castilla y León, y así se le brincadará la libre oportunidad de poder elegir su destino de trabajo fijo.
«La primera vez que me presenté saqué muy buena nota, pero me quede a las puertas de obtener la plaza por un error en la convocatoria», asegura la profesora. Este momento afectó a la palentina, ya que acababa de ver como sus esfuerzos de estar estudiando 8 horas todos los días no habían dado sus frutos, pero el conseguir trabajo en Soria no la acabo de desilusionar y mantuvo su idea de volver a intentarlo.
La siguiente oportunidad cercana a conseguir la plaza la tuvo en 2023, en una convocatoria especial en la que solo tenía que realizar la parte teórica. «Llevaba estudiados cuarenta y pico temas de todos los que hay, tenía un 98,2% de que me saliera un de esos temas, pero no me salió», explica González. Aun incluso con este desafortunado suceso, Laura aprobó el examen, pero volvió a quedarse a una décima de conseguir la plaza.
Tras esta situación, decidió que ya iba a dejar de intentarlo. Tenía puesto de trabajo y podía continuar en él sin necesidad de tener la plaza. A parte, la preparación para las oposiciones estaba haciendo que sus días se resumieran en trabajar y estudiar. «Tenía que seguir con mi vida, quería hacerla de manera normal, quería salir con mis amigos, acometer las actividades que hacía antes y despejarme un poco de solo trabajar y estudiar», sentenció.
Al final en las oposiciones, a demás del esfuerzo personal de cada una de las personas, entra también la suerte. Y en este caso parecía estar de su lado. «En 2024 volvieron a sacar otra convocatoria, algo que no es normal por el poco tiempo entre ellas, y vi mi oportunidad de presentarme una última vez», González añade que se tomó ese momento como una señal, ya que «tenía todos los temas recientes de habérmelos estudiado el año anterior». Y, finalmente, Laura González, se preparó, realizó el examen y obtuvo un 10 en el tema y en la unidad y programación otro. De manera que sumando los puntos de la experiencia, la palentina acabó primera de Castilla y León y tuvo la oportunidad de elegir con prioridad sobre los demás.
El momento de recibir las notas es otra de las situaciones más tensas tras realizar las oposiciones y, para este instante de la verdad, Laura González decidió estar con una amiga suya que anteriormente había sacado la plaza en las oposiciones convocadas.
La primera nota que salió fue la del examen de desarrollo, en el cual no se esperaba que fuera tan alta, ya que a la hora de llevarlo a cabo la preguntaron un tema similar al que ella estudió, de manera que relacionó los contenidos que ella conocía con los del seleccionado. «Al final, parece que gustó mi manera de desarrollar el tema porque un 10 no se lo suelen poner a cualquiera», concluye González.
Por otro lado, en el examen iba con mucha más seguridad de superarlo y poder sacar muy buena nota en él. «Para esta parte me preparé la presentación bastante bien, organicé archivadores con las diferentes unidades didácticas de biología y prepare los recortes y encuadernados cinco días antes junto con unos amigos que se ofrecieron a ayudarme», explica Laura. «Ese día me presenté en el aula con una maleta enorme en la que llevaba todo el material que me había organizado», agrega.
Tras este gran esfuerzo, y tras haberse llevado un susto la primera vez que revisó las notas, tal y como explica, «la primera vez que me metí en la página empecé a buscar mi nombre, pero lo confundí con el de otra Laura González, no tenía casi fuerzas para volver a revisar la página y tuvo que hacerlo mi amiga por mi», apunta la profesora de Biología tras haber conseguido el objetivo que había estado persiguiendo desde 2018.
«En el momento en el que ya había aprobado las oposiciones y me había asegurado la plaza me encontré con una situación en la que ya no tenía el estrés de estar estudiando», señala González, quien también asevera que «ahora es el momento para centrarme totalmente en la enseñanza que voy a llevar a cabo en el instituto Jorge Manrique».
Aunque ya llevaba el último año impartiendo clases en ese mismo instituto, este curso lo afronta de una manera ligeramente diferente, pero siempre con la misma ilusión y con las mismas ganas de enseñar y transmitir su pasión a sus alumnos, algo que lleva acumulando desde que pasó por la adolescencia, que supuso el momento en el que sus profesores de entonces también la introdujeron en este fantástico mundo.
Además, Laura González está dispuesta a ayudar a todas aquellas personas que quieran prepararse para futuras oposiciones de Magisterio y ha creado una página web a través de la cual ofrece ideas para la parte práctica y para la parte de desarrollo de unidades didácticas.