El colegio La Salle de la capital mostró ayer su faceta más científica gracias a la Feria de Ciencias que tuvo lugar en el centro. A lo largo de la mañana, los 60 alumnos de primero de la ESO se convirtieron en profesores que dedicaron la jornada matutina a enseñar a sus familiares y compañeros los proyectos y trabajos, relacionados todos ellos con diferentes ámbitos científicos, que habían realizado en las semanas previas. 

«Es una feria en la que se invita a familiares y compañeros, y eso supone un elemento motivador. Los alumnos aprenden una cosa y se especializan en algún área del conocimiento con el objetivo de presentárselo a los demás», explicó el director del centro, Juan Antonio Rojo. 

A lo largo de las cuatro salas que compusieron la feria, los alumnos de primer curso de secundaria exhibieron sus trabajos relacionados con la biología, la geografía o las matemáticas, entre otros ejemplos. El análisis de las bacterias presentes en un yogur, la presencia de maquetas para escenificar los diversos relieves de la Tierra, un reloj de la vida para explicar a través de las fracciones la evolución del planeta, las partes de las células o herramientas para mostrar cómo son los espectros lumínicos son solo algunos de los muchos ejemplos que podían verse ayer.

Además de las disciplinas mencionadas, los alumnos dedicaron parte de su trabajo a otros campos del conocimiento como la religión, la tecnología e incluso los idiomas. De esta manera, la de ayer no fue una simple jornada de exhibición, sino que fue la materialización de un trabajo divulgativo, plástico y, sobre todo, de cooperación. «Todos los compañeros han montado esta feria científica. Organizar algo conjuntamente también es motivador para los alumnos», subrayó el director. 

«No es solo  mostrar los experimentos, sino dar un empaque», matizó Rojo, quien a su vez detalló que cada alumno tenía una función para ofrecer «un producto muy unificado». «Hay compañeros que presentan el acto, otros que guían a los asistentes por el recorrido, otros que los despiden, etc», añadió. Cabe señalar que la organización también participaron varios miembros del profesorado. 

PROYECTO 'LIFE'. La celebración de la Feria de Ciencias es el cierre del proyecto Life en el que han estado trabajando los alumnos de La Salle durante las dos últimas semanas, y que ha tenido como principal enfoque la biodiversidad. Este proyecto ha permitido a los estudiantes explorar diferentes conceptos del ámbito científico a través de la práctica, trasladando la teoría a la vida cotidiana de una forma tangible y emocionante, tal y como detallan desde la propia entidad.

Este trabajo forma parte de la nueva metodología educativa aplicada en el centro, la cual recibe el nombre de Nuevo Contexto de Aprendizaje (NCA). Según apunta el centro, lo que busca este nuevo sistema es proporcionar un aprendizaje más significativo en el que los alumnos puedan aplicar sus conocimientos de manera práctica, a la vez que comprenden la importancia de la ciencia. 

De esta manera, la jornada que se celebró ayer es la muestra de cómo los alumnos que han  participado en ella han materializado los conocimientos obtenidos en el proyecto Life gracias a los diferentes experimentos, muestras y presentaciones que invadieron las salas de La Salle. 

Además de la divulgación científica, la feria fue un gran escenario para que familiares y compañeros pudieran intercactuar directamente con los estudiantes y conocer más sobre la nueva metodología educativa NCA aplicada por el centro.