El Ayuntamiento de Barruelo de Santullán tienen la intención de regular el consumo de agua a lo largo de la legislatura, por eso ha puesto en marcha una ordenanza para penalizar con hasta 3.000 euros el mal uso de este bien. La normativa entraba en vigor el pasado lunes, tras ser aprobada en pleno y expuesta en el Boletín Oficial de la Provincia.

«Se trata del primer paso, porque nos hemos encontrado con que la Guardia Civil nos ha traído sanciones para tramitarlas y nos ha sido imposible al no existir ordenanza», apunta el alcalde, que considera que «el agua es un bien de todos y para todos, por lo que no se puede permitir un mal uso».

La norma establece tres tipos de sanciones: leves, graves o muy graves. En este caso, y conforme a las restricciones decretadas por el Ayuntamiento, en épocas de necesidad, los vecinos que no las respeten podrán ser multados con sanciones de hasta 3.000 euros.

Desde el Ejecutivo Local destacan que su intención no es la de sancionar a nadie, «sino concienciar de la importancia del buen uso del agua». Asimismo, el equipo de Gobierno adelanta que, a lo largo de la legislatura, se pretende cobrar por consumo con contadores, «puesto que lo más justo y legal es que se pague conforme a los metros cúbicos consumidos» y no a través de una cuota fija como la que hay ahora.

El alcalde recuerda además que la competencia del servicio de suministro es del Ayuntamiento de Barruelo, por lo que la intención es que la gestión de todos los depósitos del término municipal pasen a depender del Consistorio titular, que sufragará su mantenimiento. Cristian Delgado asegura que «todos juntos, pedanías y Ayuntamiento, merecen el mismo servicio, de la mejor calidad y al mismo precio» y que su objetivo es que así sea a lo largo de este mandato.