El Programa Territorial de Fomento para Tierra de Campos 2024-2031 se extenderá a 206 municipios de las provincias de Valladolid, Palencia, León y Zamora y contará con una inversión de 61,4 millones en estos ocho años, con el objetivo de generar actividad económica y empleo, y con el reto de favorecer el desarrollo y el crecimiento industrial de estos territorios.
La actuación de la Junta, a cuyo borrador tuvo acceso Ical, es el primer plan de industrialización de áreas con escaso peso del sector industrial, e incluye una batería de medidas singulares y diferenciadas para materializar la implantación de nuevas empresas y al crecimiento de las que ya existen, con el foco puesto en autónomos y pymes, Además, nace como palanca para impulsar el desarrollo de proyectos innovadores y nuevas actividades, bajo la premisa de un desarrollo sostenible y equilibrado del territorio. En cuanto a Palencia se refiere, el plan se extenderá a 83 municipios y contará con el apoyo económico de la Diputación con una dotación de 4,4 millones de euros.
En el diseño del documento han participado, además del Ejecutivo autonómico, entidades locales de la zona, a través de las diputaciones provinciales y los ayuntamientos; los agentes económicos y sociales representados en el Diálogo Social; y las asociaciones y entidades con representación en el ámbito geográfico del plan. De hecho, aunque el grueso de la inversión procederá de la Junta, con 46,6 millones de los 61,4 previstos, el resto lo aportarán las diputaciones.
Dentro de las partidas, destaca la inversión de 20 millones de euros para promover la industrialización de la zona, incentivar la creación, mejora y desarrollo de suelo industrial; así como otros 20 millones más, a través de Sodical, para constituir un fondo para la financiación de iniciativas empresariales. Del mismo modo, hay una partida de 1,7 millones vinculada al Banco de Proyectos Innovadores y las Oficinas Tierra de Campos. En concreto, para promover suelo industrial, se pondrá sobre la mesa una bonificación en el precio de venta del mismo del 50 por ciento en los polígonos industriales públicos hasta la finalización del periodo de vigencia de este programa. Además, los proyectos de empresas y emprendedores podrán tener una consideración de prioritarios dentro de la Lanzadera Financiera del ICE y se prevé un fondo de capital riesgo, dotado al menos con 20 millones de euros, destinado a la industrialización del territorio.
Se apostará por la concesión de subvenciones destinadas a financiar proyectos empresariales de inversión con especial atención a los ubicados en los municipios que cuenten con un Programa Territorial de Fomento aprobado. Además, habrá personas con presencia permanente en el territorio para el fomento de la innovación y el emprendimiento empresarial, y existe el compromiso de simplificar y agilizar los permisos y autorizaciones para nuevos proyectos industriales con el fin de reducir las cargas administrativas. La previsión es que todos los plazos de los procedimientos se reduzcan a la mitad y los trámites para la obtención de permisos y autorizaciones no superen, en su conjunto, los tres meses.
Habrá un presupuesto de tres millones desde Somacyl para la ejecución de un programa de vivienda joven; 500.000 euros para la adquisición de viviendas por parte de los municipios para incrementar el parque público de alquiler durante el primer año; y 250.000 de euros, en el periodo 2024-2025, para que crezca el parque público de alquiler social a través de la recuperación de inmuebles en desuso que sean de titularidad municipal.
En la misma línea, el Ejecutivo autonómico se compromete a destinar fondos para impulsar el Programa Rehabitare, y las diputaciones provinciales a dar el apoyo técnico a los municipios interesados en esta medida. El plan consultado por Ical busca impulsar la producción sostenible de alimentos, su circularidad y la puesta en valor de la industria agroalimentaria y ganadera, la tradición artesanal y el producto transformado local. Para ello, se destinarán 1,7 millones para un Banco de Proyectos Innovadores y la creación de las Oficinas Tierra de Campos, como forma de intervención desde el territorio.
En el ámbito energético, se invertirán 171.300 euros para la asistencia técnica de, al menos, dos comunidades energéticas, y, como mínimo, cuatro instalaciones de producción de biogás de diferente tipología, replicables, factibles técnica y económicamente. Habrá, al menos, una por provincia.