Los monteros alaban la «abundancia» del corzo

P.T.M.
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La Junta de Castilla y León pone en funcionamiento el nuevo sistema de precintado. Las piezas abatidas podrán monitorearse de forma sencilla a través de una aplicación móvil que no requiere de cobertura

Imagen de archivo de una manada de corzos en el campo. - Foto: Alberto Rodrigo

Los cazadores palentinos, al igual que los del resto de la región, aguardan el inicio de la caza mayor del corzo, que dará comienzo el próximo martes y se extenderá hasta el 3 de agosto.

La población actual de este animal invita al optimismo entre los aficionados al campo, pues, como apuntó a Diario Palentino el delegado provincial de la Federación de Caza de Castilla y León, José de Luis Cantero, la población es «muy abundante». «Sin lugar a duda, se prevé una temporada mejor que la anterior», afirmó.

Al igual que ocurre con otras especies, la distribución de esta res se ha visto condicionada por la actividad de los depredadores. Si bien antes, como detalló el colectivo cinegético, los corzos tenían una mayor presencia en las comarcas del norte, ahora se encuentran en prácticamente toda la provincia, especialmente en el Cerrato. «Hace unos años, como mucho, bajaban hasta Saldaña», recordó De Luis. 

Esta situación se ha visto propiciada tanto por la actividad humana como por los ataques de cánidos. «El lobo es el depredador por antonomasia de la fauna castellana y leonesa. Este animal ha provocado el movimiento poblacional del corzo en toda España», afirmó.

El inicio lluvioso de la primavera no tendrá, de momento, efectos negativos sobre la caza. Y es que, según concretó el delegado provincial de la Federación, la climatología empezaría a ser perjudicial solo cuando los animales comenzaran a anidar, por lo que, hasta la fecha, «todo el agua que caiga es bueno».

CONTROL TELEMÁTICO. Una de las grandes novedades de la presente temporada es la entrada en funcionamiento del precintado telemático instaurado por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, tal y como se recogió en una orden publicada en el Bocyl el pasado 20 de marzo.

Este nuevo sistema busca sustituir a los actuales precintos de plástico con los que hasta ahora se controlaba la caza mayor. La nueva metodología permitirá monitorear los ejemplares abatidos bien mediante una sencilla aplicación en el móvil que no requiere de cobertura o bien mediante la toma de datos en formato papel.

El control telemático se realizará mediante la aplicación Capturcyl, la cual, tras la batida de la pieza, generará un código QR con el que acreditar la legalidad de la captura. El Gobierno regional incide en que esta aplicación no geolocaliza al cazador, si bien sí localiza el lugar donde se ha abatido al animal en el momento en el que se emite el precintado. 

«Aunque debemos decir que cada vez tenemos más trabas administrativas, que también es así, el fin de la medida es bueno. Se busca que los controles poblacionales de los animales cazados tengan datos veraces», alabó De Luis, quien, por otro lado, reconoció que «al principio, hasta que nos actualicemos y estemos duchos en el manejo, se puede dar alguna incidencia». 

La otra opción para controlar las especies cinegéticas pasa por el precinto en papel, una autorización que facilitarán a los cazadores los titulares o administradores de los cotos. Una vez efectuada la captura, el montero deberá cumplimentar a mano la fecha y hora, así como la declaración responsable en la que indicará que se la ha comunicado al titular, quien deberá grabarla en la aplicación web y remitirla en un plazo de siete días al Gobierno regional. 

Esta medida no ha tenido la misma aceptación en todos los sectores del colectivo cinegético. La Asociación delCorzoEspañol, por su parte, lamentó la «precipitación» con la que la Junta ha implantado, mediante Orden, la obligatoriedad de este nuevo sistema. Así las cosas, la asociación propone, entre otras medidas, la creación de precintos diferenciados para ejemplares adultos y juveniles; ampliación de períodos de caza en lo que respecta a hembras y juveniles en aquellas zonas en las que la población de corzo esté tensionada o la promoción de campañas de divulgación impulsadas por el Ejecutivo regional para tener un mayor conocimiento sobre el estado de la cabaña. 

Por todo ello, el colectivo instó a la Junta a retirar la Orden sobre los nuevos precintos y a abordar los cambios en la gestión con «todos los actores afectados».