Los datos de Palencia en la Encuesta de Población Activa (EPA), facilitados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en el último trimestre, reflejan que bajó el desempleo en la provincia en 1.400 personas, lo que supone un 22%, el mejor dato de Castilla y León, seguido por Ávila (9,1% y 800 parados menos) y Burgos (7% y 900 parados menos. En el cómputo desde el punto de vista interanual, el número de trabajadores que abandonaron las lista del paro en el conjunto de la provincia sumaron 600, lo que supone una bajada del 10,9%.
De esta forma, a 30 de septiembre el número de desempleados en Palencia, según la EPA, se situó en los 4.900, lo que supone una tasa de paro del 6,6% -la más baja de la Comunidad -cuando la media autonómica es de 9,5%, con 2,9 puntos menos, y la nacional del 11,8%, quedando la provincia 5,2 puntos por debajo en cifras de personas en paro.
En cuanto al conjunto de Castilla y León, el desempleo subió en el tercer trimestre un 5,92%, con 6.000 parados más, en comparación con el periodo de abril a junio, hasta un total de 106.600. En España, creció en menor medida, un 3,36%, lo que supone 92.700 más, hasta situarse en los 2.855.200.
La EPA refleja 1.400 parados menos en la provincia - Foto: Sara MuniosgurenEn el análisis provincial, en el último trimestre había 68.900 personas ocupadas y 4.900 paradas, con una tasa de actividad del 55,41% y un 6,61% de parados. Por sexos, la EPA refleja 38.500 hombres activos y 30.400 mujeres, con sendas tasas de actividad del 61,94% y 49,09%, respectivamente. En cuanto al desempleo, 2.100 hombres se encuentran en esta situación, la igual que 2.800 mujeres con unas tasas del 5,06% y un 8,51%, respectivamente.
Por provincias, en el tercer trimestre del año, el paro bajó en Ávila, con 800 desempleados menos, hasta los 8.000; en Burgos, con 900 menos, hasta los 12.000 y en Palencia, en 1.400, hasta los 4.900. Por el contrario, aumentó en 2.300 en León, hasta los 20.800; en 2.200 en Salamanca, hasta los 17.400; en 2.800 en Segovia, hasta los 8.100; en 500 en Valladolid, hasta los 22.300, y en 1.500 en Zamora, mientras en Soria se mantuvo estable en 3.400.
En cuanto a la tasa de paro, se redujo en relación al trimestre anterior, en Ávila, hasta situarse en el 10,95%, Burgos (6,94%), Palencia (6,61%) y Soria (7,69 %). Por el contrario aumentó en León, hasta el 10,41%, en Salamanca (11,23%), Segovia (10,17 %), Valladolid (8,88 %) y Zamora (12,66%).
valoraciones sindicales. En cuanto a las valoraciones sindicales, desde UGT se habló de «claroscuros» en los datos provincializados de la Encuesta de Población Activa (EPA). «Es cierto que se ha reducido el número de parados respecto al trimestre anterior y el pasado año, pero no lo es menos que tanto la tasa de actividad como de ocupación todavía está muy lejos de las que teníamos en 2022. También, la mayoría de indicadores demuestran que aumenta la brecha entre hombres y mujeres en el mercado del trabajo», explicó el secretario provincial, Gorka López.
En este sentido indicó que aún hay mucho camino que recorrer. «Nuestro sindicato viene denunciando el alto porcentaje de desempleados de larga duración, casi un 40% del total en la provincia, lo que refleja la dificultad de reincorporarse a un puesto de trabajo de este colectivo.Los servicios públicos de empleo necesitan de más medios humanos y tétnicos para realizar su labor», expuso el dirigente sindical.
Por su parre, Elena Villamediana, secretaria provincial de CCOO, se refirió a datos «positivos de la EPA en la cifra de ocupados al crearse empleo y también un descenso en el número de parados», al tiempo que señaló que «el dato negativo es la pérdida de activos, lo que supone que hay gente que deja la provincia con intención y edad de trabajar, incidiendo en la caída poblacional».
«Está demostrado que un mercado laboral sólido, dinámico y fortalecido es indispensable para fijar población. Si comparamos los datos de la EPA con los de hace un año son aún peores, dado que se pierde población activa y también ocupados. Para revertir esta tendencia se necesita poner en marcha una serie de políticas de empleo, que son competencia de la Junta, y permitan generar actividad económica, atraer al territorio personas para incorporares a un trabajo en condiciones dignas», aseveró.