La Guardia Civil ha detenido a un hombre, de 47 años de edad, como presunto autor del incendio forestal de nivel 2 que se originó el domingo en la zona de Quintanilla del Coco (Burgos) por una negligencia grave. Al parecer, por utilizar una cosechadora fuera del horario permitido, según informaron fuentes de la Dirección General de la Guardia Civil.
Mas tarde, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Lerma (Burgos) ha acordado poner en libertad al detenido. La jueza, de conformidad con el criterio del fiscal, ha acordado su libertad sin medidas cautelares. El juzgado seguirá practicando las diligencias necesarias encaminadas a determinar las circunstancias en las que se declaró el incendio así como la participación del sospechoso y si éste estaba trabajando con su cosechadora fuera del horario establecido en el marco de las medidas extraordinarias que estaban vigentes entre el 20 y el 24 de julio.
El hombre, que en su comparecencia en el juzgado se ha acogido a su derecho a no declarar, queda como investigado en una causa abierta por un delito de incendio por imprudencia grave.
El incendio, que comenzó el domingo por la tarde, ha afectado hasta la fecha a más de 3.000 hectáreas de monte, arbolado y cereal de la comarca burgalesa de Sabinares del Arlanza, además de daños materiales en viviendas de varias localidades. Las llamas provocaron la evacuación y desalojo de 900 personas de Santibáñez del Val, Santo Domingo de Silos, Villanueva de Carazo, Carazo y Hacinas.
El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Comandancia de Burgos se hizo cargo de la investigación para conocer el posible origen y causas del incendio. Tras la información recabada de la inspección técnico ocular practicada en el paraje y las numerosas entrevistas mantenidas con vecinos, todo apunta a que el fuego se originó pasadas las 12.00 horas de ese día en una finca de cereal donde se estaban llevando a cabo labores agrícolas.
Según la información obtenida hasta este momento, parece existir una negligencia grave del detenido, ya que en la franja horaria en que se sucedieron los hechos, los trabajos relacionados con la cosecha se encontraban prohibidos por la Junta de Castilla y León, al ser obligatorio hacer una parada entre las 12.00 y las 19.00 horas por la grave situación de riesgo de incendios.
La investigación sigue abierta, ya que no se descarta la posible intervención de más personas en los hechos. Las diligencias instruidas serán entregadas en el Juzgado de Lerma.