El presidente del Consejo de Cuentas de Castilla y León, Mario Amilivia, defendió este jueves el "modelo de éxito" de los órganos de control externo tras destacar la participación de la institución que preside en un total de 33 fiscalizaciones horizontales en colaboración con el Tribunal de Cuentas durante los últimos 20 años, es decir, el periodo de su existencia en coordinación con el órgano nacional. Desde su punto de vista, esto supone "un plus de garantía" para el ciudadano y para las administraciones públicas.
Las fiscalizaciones horizontales, según explicó en declaraciones recogidas por Ical en el Patio de Escuelas de la Universidad de Salamanca, se refieren a las actuaciones en conjunto dentro del ámbito autonómico que implican al Tribunal de Cuentas, incluidos los territorios de España que no tienen órganos de control externo, es decir, las comunidades de Extremadura, Cantabria, Rioja y Murcia, y las dos plazas norteafricanas, Ceuta y Melilla.
En este sentido, Amilivia recordó que "antes de la existencia del Consejo de Cuentas, el Tribunal de Cuentas había llevado a cabo 45 fiscalizaciones en 20 años en Castilla y León, y 20 años después de la coexistencia, hemos llevado a cabo 300 fiscalizaciones, más 33 de carácter horizontal", cifró, ejemplificando con aquella referida a la contabilidad analítica de las universidades públicas para subrayar la importancia de la reunión que hoy tiene Salamanca como sede.
Los órganos de control externo autonómicos (OCEX) y el Tribunal de Cuentas, reunidos hoy en la Antigua Capilla de las Escuelas Mayores, habitual sede del Consejo de Gobierno de la Universidad de Salamanca, colaboran actualmente en varias fiscalizaciones del ámbito autonómico, como la gestión de la vivienda protegida en el conjunto del país, "un asunto sensible en España", según matizó Amilivia, o la digitalización del sistema educativo, que "a la luz de lo padecido con el COVID, es fundamental poder digitalizar con las garantías de ciberseguridad". E incluso, en el ámbito local, según certificó, se abordará la implantación en las ciudades de las zonas de bajas emisiones.
"Estas comisiones son muy importantes porque nos vinculamos todos a ellas. Lo que aquí se decida se incorporará, en nuestro caso, a nuestro futuro Plan Anual de Fiscalizaciones, que será objeto de debate en las Cortes, y es una fiscalización que se llevará a cabo", añadió Amilivia. Es la tercer vez que el Tribunal de Cuentas elige salamanca tras la celebración de un Pleno, la Comisión de Coordinación Local y ahora la Comisión de Coordinación Autonómica.
Por su parte, el consejero del Tribunal de Cuentas Luis Antonio de Padua Ortiz de Mendívil, recordó que esta reunión es de carácter periódico y bianual. "Efectivamente nuestra función es la de fiscalizar las cuentas públicas, los gastos y los ingresos, y acometemos temas que afectan a todas las comunidades autónomas para luego elaborar los informes y exponerlos", manifestó en declaraciones recogidas por Ical.
A la reunión, asistieron los presidentes de la Cámara de Comptos de Navarra, Ignacio Cabeza; del Tribunal Vasco de Cuentas Públicas, Ana Helguera; el presidente de la Cámara de Cuentas de Castilla-La Mancha, Fernando Andújar; el Pleno del Consejo de Cuentas de Castilla y León, así como consejeros y personal técnico de las distintas delegaciones de los 13 órganos autonómicos, incluyendo de la Cámara de Cuentas de Madrid, Audiencia de Cuentas de Canarias, Consello de Contas de Galicia, Sindicatura de Comptes de Cataluña, Sindicatura de Cuentas de Asturias, Cámara de Cuentas de Andalucía y Cámara de Cuentas de Aragón, y del propio TC. En total, una veintena de asistentes.