Artistas renacentistas de la talla de Pedro y Alonso Berruguete, Juan de Juni o Alejo de Vahía tienen su hogar en el museo territorial Campos del Renacimiento, consolidado ya en sus primeros tres años de vida como «modelo de desarrollo rural» vinculado al patrimonio religioso en el lugar donde estas piezas de arte fueron creadas.
Así lo concretó la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén, durante una visita a sus cinco sedes en Becerril de Campos, Paredes de Nava, Fuentes de Nava y Cisneros. Cuatro localidades que se han convertido en un «referente» del arte barroco, pues no todas las provincias pueden presumir de contar con una de las «principales colecciones de España», solo por detrás de lugares emblemáticos como el Museo Nacional de Escultura o el de Bellas Artes de Valencia.
Por ella han pasado en estos tres años de vida 36.663 visitantes (11.500 el último año), principalmente de Castilla y León, Madrid y País Vasco. No en vano, Campos del Renacimiento es ya uno de los productos culturales «más importantes de la comunidad desde el punto de vista cultural y artístico con obras de primer nivel fruto de la fe del pueblo», tal y como concretó su director, José María Vicente.
Llegar hasta lo que hoy es el museo territorial ha sido un camino largo que se ha resuelto de manera satisfactoria gracias a la colaboración entre Diputación (quien pone la financiación), Obispado (titular de las obras y de las sedes) y Fundación Las Edades del Hombre (encargada de la musealización). Tres pilares para un proyecto convertido en un ejemplo a seguir que bebe sus orígenes cientos de años atrás, pero a la altura de lo que demanda el viajero del siglo XXI.
De ello dio buena cuenta ayer el obispo, Mikel Garciandía, en su primera visita oficial al museo como prelado palentino. Un paso significativo en la promoción y preservación del rico legado cultural de la región, así como un reconocimiento a la labor conjunta de las instituciones involucradas en este proyecto.
Durante la misma destacó lo «emocionante» que para él resultaba «contemplar estas obras que reflejan la devoción y el arte en tantas generaciones». Es más, a su juicio, el proyecto «despierta un profundo sentido de admiración y gratitud por nuestra herencia espiritual y cultural».
PRESENTE Y FUTURO
«Es un proyecto pionero: un único museo, un único relato, una única gestión y todas las manos potenciándolo». Así calificó el delegado diocesano de Patrimonio Artístico, José Luis Calvo, al museo territorial Campos del Renacimiento. Una iniciativa que «enorgullece a Palencia», apuntó Armisén, quien añadió que «ha dado lugar a un espacio único que promueve la cultura, la historia y el turismo en la provincia».
En este contexto, confirmó que mantendrá su apuesta económica por la dotación turística, en cuya consolidación centrarán ahora sus esfuerzos los promotores de este proyecto pionero a nivel nacional. «Ser un recurso turístico patrimonial de este siglo ha requerido su musealización, la utilización de medios digitales y facilitar el acceso a las instalaciones», resumió Armisén durante la visita a la iglesia de Santa María de Becerril de Campos, donde puso en valor la promoción «desde lo local» al resto de la provincia, de Castilla y León y deEspaña.
«Seguiremos trabajando en el marco de una colaboración leal con el objetivo de darnos a conocer cada vez más», concluyó la presidenta, que estuvo arropada también por la diputada de Cultura, Carolina Valbuena, y por representantes municipales de los pueblos anfitriones.