Estas son las primeras elecciones en las que Izquierda Unida y Podemos van de la mano en la capital. Para ello, han elegido a una cara nueva, Rodrigo San Martín, sobrino del histórico dirigente de izquierdas, quien lleva cuatro años colaborando para el grupo municipal de Ganemos.

Usted debuta en la primera línea de la política estas elecciones. ¿Cómo está siendo la inmersión en este proceloso mar de una campaña electoral?

Yo entro en política porque tengo la ilusión de cambiar las cosas, porque he venido padeciendo los últimos mandatos, sobre todo los 12 años que lleva gobernando el Partido Popular y Ciudadanos, que Palencia vaya muy mal en población, autónomos, empresas... Por eso, en 2019 me vinculo a Ganemos Palencia y me presento a sus primarias siendo un absoluto desconocido para trasladar a mis familiares y amigos que esa es mi opción política.

A través de esa puerta comienzo a trabajar en el grupo municipal con Sonia Ordóñez, a vivir el día a día del Ayuntamiento, a leer pliegos e informes y a ver todas las problemáticas que hay en la ciudad. Eso es lo que hace que me pique el gusanillo y que con el respaldo de los compañeros de IU y Podemos me presente ahora como candidato a la Alcaldía. Es una labor jodida pero tiene una parte buena que compensa: me gusta, creo en ello y estoy seguro de que la política puede mejorar las cosas.

Esta va a ser la primera vez que en unas municipales van de la mano Izquierda Unida y Podemos. ¿En qué se va a diferenciar de la etapa de Ganemos?

Básicamente, no habrá grandes cambios en la acción política. Ganemos era, jurídicamente, Izquierda Unida con Unidad Popular, pero lo que ahora hemos conseguido es que para estas municipales en Palencia haya un única lista de izquierdas, la nuestra -siempre me gusta recordar que el PSOE no es de izquierdas- por lo que creemos que aglutinando todo ese voto progresista podemos cambiar las cosas.

En 2019, conviene recordarlo, perdimos los votos de Podemos porque no alcanzaron el 5%. Aquello dolió, así que hemos aprendido del error, a lo que hay que sumar que Ganemos, de forma muy inteligente, como no había forma jurídica de unirnos, se han comportado de forma muy noble y se han apartado para dejar una única lista de izquierdas y que todo el voto cuente. Eso nos va a dar mucha fuerza.

¿Por qué? 

Entre otras cosas, porque los otros candidatos están quemados y muy desgastados. El que Polanco, por ejemplo, se vuelva a presentar tras el cambio de cromos que se hizo en 2019, no lo veo muy factible. A mí, votantes del PP me han dicho que esta vez ni siquiera iban a ir a votar, lo que me demuestra que existe un hartazgo entre la ciudadanía. 

¿Nota ganas de cambio en Palencia?

Sí, muchas, lo que pasa es que competimos con otras fuerzas. Por ejemplo, me parece que ese concejal que la encuesta da a Ciudadanos va a ser de ¡Vamos Palencia! La ciudad necesita un cambio radical pero realista, un camino diferente, porque las políticas de derechas no han funcionado. 

¿Cuáles son sus principales propuestas para la capital?

En primer lugar, recuperar servicios. El 98% de todos los servicios públicos del Ayuntamiento están externalizados y vemos que es un sistema que no funciona, que los pliegos se incumplen sistemáticamente. Por eso, queremos municipalizar desde las escuelas infantiles de 0 a 3 años al Servicio de Ayuda a Domicilio, donde sabemos que se está quedando gente fuera. Una ciudad como Palencia, donde la mayoría de la población es cada vez más mayor, no puede permitir eso.

También municipalizaremos servicios más pequeños, como el Punto Limpio o la grúa. Por desgracia, no podremos hacerlo con el agua porque hay contrato hasta el 2031 ni las basuras, que el actual equipo de Gobierno lo va a dejar dado por un plazo de 10 años. 

Por otra parte, en nuestro programa también es fundamental un mantenimiento integral de la ciudad. Nosotros no vamos a hacer ninguna gran obra ni llevamos nada mágico en el programa. Queremos cuidar Palencia, lo cercano, por lo que queremos desplegar en los barrios, que han estado muy olvidados estos años frente a un centro muy mimado y privilegiado, una inversión importante. 

¿Y en materia de empleo?

Queremos desplegar un plan de empleo muy fuerte, dotado con hasta 3 millones de euros, para tratar de retener a nuestros jóvenes, junto a un programa de creación de viviendas en alquiler social que cuesten, como mucho, entre 200 y 250 euros. Para ello, aprovecharemos las viviendas de la Sareb, 35 en la capital, y vamos a ver si con todas estas medidas conseguimos, no voy a decir que la población aumente pero sí retener y no seguir disminuyendo, porque en 15 años hemos pasado de ser 82.000 a 76.000 personas.

Siempre ponéis el ejemplo de Zamora, una ciudad gobernada por IU desde hace ocho años. ¿Qué pensáis que tiene que pasar en Palencia para que eso ocurra?

En Zamora implosionó el PSOE y sus votantes se marcharon a IU porque llegó gente normal a gobernar y gustó tanto que hace cuatro años les dieron una mayoría absoluta. 

Quizá aquí en Palencia no vamos a ser tan fuertes esta primera intentona, porque soy una cara nueva y no me conoce tanta gente, pero eso puede ser un algo a mi favor. Yo no soy político, soy una persona normal, que ha currado en más de diez trabajos diferentes y que lleva 14 años cotizados... No soy Polanco ni Miriam Andrés y espero que los votantes lo aprecien.

¿Por qué te tienen que votar los palentinos el día 28?

Quiero ser honesto con la gente y me gustaría que leyeran nuestro programa. Son 236 medidas y aunque sea un poco denso, me gustaría que se empapasen con unas cuantas y vean si les gusta. Si es así, que voten en conciencia. Solo les puedo prometer que mi máxima es programa, programa y programa, porque no vamos a hacer magia sino que lo que es posible que sea posible.