Diego de Giráldez, nacido en A Cañiza y vigués de adopción, inauguró ayer en el centro cultural provincial la exposición que lleva por título Esencia del realismo, en la que reúne una selección de obras realizadas entre 1981 y la actualidad, según expuso el arista, quien concretó que cuelga 31 cuadros. La muestra, que ayer abrió sus puertas, podrá visitarse hasta el próximo 16 de febrero, de lunes a sábado en horario de 11 a 14 y de 17 a 21 horas, y domingos y festivos de 11 a 14.
De Giráldez, quien agradeció el «esfuerzo» de la Diputación para traer esta exposición a Palencia, «tierra de arte en mayúsculas», explicó que en la muestra el visitante encontrará obras de dos etapas, una en la que el protagonismo corresponde al «ruralismo», y otra centrada en algo propio, el realismo NAS (naturalismo, abstracción y surrealismo).
En lo que se refiere a los cuadros basados en el ruralismo, comentó que se hayan bajo el paraguas de las muchas pequeñas ferias que se celebraban en las aldeas, donde llevaban lo que cultivaban o criaban, y que fueron desapareciendo.
En la presentación de la muestra el artista se refirió a su relaciós con Salvador Dalí entre 1977 y 1989, en cuyo marco circunscribió su participación en Maestros del Realismo en 1980. «Lo que hice en 1982 fue crear un movimiento que llamé Realismo NAS», subrayó, para indicar a renglón seguido respecto a las composiciones que ampara que «es una especie de surrealismo en el que cambian aspectos. Dalí deformaba parte del objeto y yo lo que hago es que floten o los coloco en un ambiente que no tiene nada que ver con la realidad». «En el naturalismo trabajo la tridimensión epidérmica», añadió.
Con una paleta oscura en muchas de sus obras, los tonos verdes y carmines cobran relevancia en la técnica mixta que él utiliza, óleo y pastel. Fruto de la observación minuciosa, el estudio de lo que quiere realizar y sus bocetos, llega a su obra final, la cual se convierte en única e irrepetible por el tratamiento y el carácter que Diego de Giráldez imprime en ellas. «Las sensaciones, las situaciones, las imágenes que trato demuestran el valor de los objetos. Las calidades, la plasticidad, también cierto simbolismo, una realidad a veces fabulosa», afirmó.
Desde muy temprana edad le interesó el dibujo y la escultura a Diego de Giráldez, quien realizó sus estudios en la Escuela de Artes y Oficios de Vigo, ciudad en la que a los 17 años montó su primera exposición individual. Viajó por diferentes lugares de Europa y en Cataluña conoció personalmente a notables personalidades del mundo de la cultura como son Salvador Dalí, Antoni Pitxot, Gala o Cugat.
Experimentando en el campo de la abstracción, el naturalismo y el surrealismo sin abandonar el realismo, realiza una serie de cuadros con influencias de lo que sería, con el paso de poco tiempo, su gran descubrimiento: el Realismo NAS (Naturalismo, Abstracción y Surrealismo), que él crea, da a conocer y registra en 1982.
Con más de 400 exposiciones individuales y obra en más de 150 museos en todo el mundo, Diego de Giráldez es considerado uno de los grandes exponentes del realismo español. En 2006 se inaugura en A Cañiza la Casa Museo Diego de Giráldez, que cuenta con más de 300 obras, retratos, naturalezas, bodegones, temas religiosos… y escu