Juristas contra el Ruido considera que Adif «está obligada»

DP
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El colectivo apela a sanciones más severas y a promover inversiones en tecnologías de insonorización

El conflicto entre el Ayuntamiento y Adif por los trabajos nocturnos en el Camino Viejo de Husillos ha acaparo la atención más allá de Palencia. Agustín Bocos, abogado y fundador de Juristas contra el Ruido, considera que el administrador «está obligado» a acatar estas normativas, independientemente de su alegación de que las obras son de «interés general». Así, en una entrevista en La Ventana de Castilla y León, de la Cadena SER, Bocos fue contundente al señalar que Adif «encuentra rentable saltarse la normativa», ya que las sanciones económicas suelen ser menores que el coste de interrumpir o retrasar las obras. Este comportamiento plantea un desafío para las administraciones locales, que intentan hacer valer sus competencias frente a un organismo estatal. Según el abogado, el ruido generado no solo vulnera el derecho al descanso, sino que también es un vertido contaminante que daña el ecosistema y desvaloriza propiedades.

El problema del ruido en Palencia, derivado de las obras del AVE, se suma a una problemática más amplia que afecta a muchas ciudades españolas. Bocos insistió en que es fundamental establecer sanciones más severas y promover inversiones en tecnologías de insonorización que minimicen el impacto acústico de este tipo de proyectos. Además, destacó la necesidad de armonizar las normativas autonómicas y nacionales para evitar lagunas legales que permitan a organismos como Adif operar al margen de ciertas regulaciones locales. El caso de Palencia podría sentar un precedente legal relevante si llega a los tribunales. En este sentido, el fundador de Juristas contra el Ruido explicó que el conflicto podría ayudar a clarificar si las legislaciones sectoriales eximen a entidades como Adif de cumplir normativas municipales y autonómicas. Por ahora, el Ayuntamiento ha iniciado un expediente administrativo contra Adif, buscando garantizar el cumplimiento de la ordenanza local y proteger los derechos de los vecinos.

Este conflicto también pone de manifiesto la necesidad de una mayor sensibilización hacia el problema del ruido como elemento contaminante. Según este colectivo, es esencial que las administraciones y los ciudadanos trabajen conjuntamente para exigir una tutela judicial efectiva frente a la contaminación acústica.