La Asociación TDA-H Palencia fue elegida como la beneficiaria de la tercera edición de la beca solidaria, dotada con 1.000 euros, de la Cofradía de Jesús Nazareno y Nuestra Madre la Virgen de la Amargura de Palencia. La cuantía que ayudará a continuar con la prestación que ofrecen a unas 200 familias de la capital y la provincia en el ámbito de la atención, e intervención especializada desde un abordaje multimodal.
La Asociación TDA-H Palencia fue la seleccionada entre un total de cinco proyectos presentados a la convocatoria, cuyo montante económico se empleará, igualmente, en sufragar gastos de mantenimiento de su actividad, dado que cuentan con dos psicólogas y otras dos psicopedagogas, las cuales prestan una "gran ayuda", ya que hay familias que no se pueden permitir económicamente las atenciones que necesitan, afirmó su presidente, José Antonio Hoyos.
Hoyos se mostró agradecido e ilusionado tras recibir el cheque con la donación nazarena, al sentirse "invisibilizados" por contar con un "respaldo económico pequeño" por parte de las administraciones, por lo que estas acciones solidarias son acogidas de buena gana, porque, según apuntó, ayudan a reducir esa "sensación de frustración" por no conseguir abarcar a todos los ámbitos y personas que les gustaría. Pese a ello, reconoció que su labor ha servido para echar una mano a muchas personas, que continuará gracias a la beca de la Cofradía.
El presidente de la Asociación TDA-H Palencia explicó que su funcionamiento se remonta al año 2009, por lo que en el próximo mes de marzo la asociación cumplirá 16 años centrada en la atención a las personas que sufren este trastorno, quien puntualizó que de las 200 familias que participan y atienden, la mayoría menores y adolescentes, existen 50 adultos.
Dejó claro que se tiene la idea de que el TDA-H afecta únicamente a niños, los cuales son "movidos, disruptivos y desorganizados", pero es una patología que "va mucho más allá y que tiene que ver con el desorden vital, temporal y espacial", donde muchos adultos han conseguido que se les diagnostique con edades más avanzadas y han descubierto cuál era su problema, ya que de pequeños se pasó por alto, ha aclarado.
Además de la sede en la capital palentina (C/Quito), cuentan con dos ubicaciones en Guardo y Aguilar de Campoo con el fin de que las familias del norte de la provincia no tengan que desplazarse para ser atendidas.