La Unión de Consumidores (UCE) denunció hoy el notable incremento de consultas y reclamaciones recibidas de los consumidores por problemas con las compañías de luz y gas en Palencia, a lo largo del último año. "Se han duplicado", explicó su portavoz, Alberto Arzúa.
Los motivos por los que reclaman van desde irregularidades en los recibos, subidas de tarifas sin un preaviso, retrasos en la lectura de los contadores de gas, cobro de servicios adicionales no solicitados, trabas para solicitar una baja o penalizaciones por baja anticipada.
Además, destacaron en un comunicado que los consumidores se quejan de una "mala atención por parte de la compañía". "Su servicio de atención al cliente se caracteriza por ser poco eficaz y tardan mucho en resolver las reclamaciones". "Cuando un consumidor realiza una llamada al servicio de atención al cliente, en vez de atenderle una persona, se encuentra con una locución que le hace preguntas y después de unos largos minutos puede que nos atienda un teleoperador, al que tendremos que volver a repetir todo lo dicho anteriormente. En otros casos, indican que todos nuestros agentes están ocupados y se cuelga la conversación", explicaron.
Ante esto, desde la UCE confían en que se apruebe "en breve" la nueva Ley de Servicios de Atención al Cliente que, entre otras cosas, persigue que la atención telefónica sea ágil y personalizada, además de limitar la atención automatizada, pudiendo solicitar en cualquier momento de la llamada ser atendidos por una persona.