La Junta de Castilla y León continuó con su plan de mejora y modernización de las infraestructuras sanitarias de la provincia con una inversión en 2023 de más de 8,8 millones de euros.
Así, para la mejora de la asistencia sanitaria que reciben los usuarios del Área de Salud de Palencia, el pasado año se tramitaron 143 expedientes de contratación que permitieron renovar las instalaciones de los centros de salud y adquirir nuevo equipamiento tecnológico.
Una de las principales inversiones es la obra de reforma del centro de salud de Frómista, adjudicado por casi un millón de euros, dentro del Plan de Mejoras de las Infraestructuras de Atención Primaria (Minap). La intervención prevista permitirá acometer una reforma integral del actual espacio para solucionar los problemas arquitectónicos que presenta el edificio tanto en el interior como en el exterior, así como una redistribución de los espacios interiores que permita la accesibilidad y un mejor aprovechamiento de las diferentes zonas acorde con las necesidades de los usuarios de esta instalación sanitaria.
La inversión de la Junta permitió también la puesta en marcha de dos nuevas salas de radiografía digital de última generación para los centros de salud de Cervera y Guardo; el suministro y puesta en funcionamiento de un nuevo mamógrafo digital de última generación para el centro de salud de Cervera, con una inversión de 259.688 euros, y la obra de adecuación del sistema de climatización de las zonas de espera del de Saldaña.
La mejora de la eficiencia energética de los centros de salud de la provincia fue otro de los objetivos de la Junta en 2023, con la inversión de más de 658.000 euros para el cambio de seis calderas de los centros de Torquemada, Barruelo, Villada, Eras del Bosque, Cervera y Guardo; a lo que se suma el cambio de la carpintería en Torquemada, Villarramiel y Palencia Rural, por importe de 127.000 euros. También se adjudicó el cambio de las luminarias en once centros de salud con una inversión de 185.000 euros.
Bloque técnico. En 2023 comenzó a ser una realidad el nuevo complejo hospitalario de Palencia, con el inicio de las obras de la primera fase del nuevo hospital. El primer paso es la construcción del bloque técnico, adjudicado por una inversión que supera los 67,5 millones de euros a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Acciona Construcción y Acciona Industrial. En esta primera fase se construirán 24.128 metros cuadrados divididos en cuatro plantas que se convertirán en el corazón del nuevo hospital Río Carrión.
Las instalaciones del actual centro también se vieron beneficiadas con la creación de una sala blanca para el Servicio de Farmacia, a la que se destinaron 692.000 euros; la impermeabilización de la cubierta, con una inversión de 131.000 euros; la obra de reforma y ampliación del Servicio de Urgencias, por 454.000 euros; la instalación de un sistema de climatización para varias plantas, con 676.000 euros; y la reforma de los baños de la planta once, a la que se destinaron 226.000 euros.
Durante 2023, la Junta tramitó inversiones destinadas a la mejora del equipamiento clínico de los servicios de la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Palencia por valor de más de 650.000 euros. Entre estas adquisiciones, destaca una torre de laparoscopia 3D para el Servicio de Urología, con una partida de 120.000 euros; un sistema de telemetría monitorización intraparto para el de Ginecología, a la que se destinaron 56.567 euros; una mesa de radiotransplante para Anestiología y Reanimación, por 28.573 euros; cardiotocógrafos para Ginecología, con una inversión de 34.000 euros; y un broncoscopio y una torre de endoscopia para Neumología por 31.460 y 25.501 euros, respectivamente.
Otras de las principales inversiones para el hospital Río Carrión fueron en equipamiento de alta tecnología. Por un importe total que supera los 221.000 euros, se adquirió una nueva central de monitorización para la unidad de Reanimación y Cirugía Mayor Ambulatoria. Asimismo, se compró un nuevo arco radiológico para el quirófano, por 144.595 euros, y tres equipos de alta tecnología para la realización de pruebas funcionales respiratorias en el Servicio de Neumología, a los que se destinaron 136.270 euros.