El mundo empresarial palentino termina el año con una efeméride importante, el 125 aniversario de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios que, se va a ver refrendado en unos días, el 25 de enero, con la apertura de unas renovadas y equipadas instalaciones en un coworking -espacio de trabajo colaborativo digitalizado para pymes, startups, autónomos o profesionales independientes- con el que se van a ampliar sustancialmente sus prestaciones al tejido productivo de la capital y provincia y que permitirá la implantación de 17 nuevos servicios.
La actuación está cofinanciada en un 50% -a partes iguales entre la Unión Europea y la Cámara- a través del programa operativo de Fondos Europeos de Desarrollo (Feder) Plurriregional de España 2014-2020. El proyecto cuenta con un presupuesto global de 750.000 euros, de los que 375.000 euros se han obtenido desde Europa, a través de la Fundación Incyde como organismo con senda financiera.
«Estos cambios van a suponer un ametamorfosis enorme para adaptarnos a lo que empresas y comercios necesitan. Es preciso crear una red de pequeños negocios y empresas de base tecnológica que tenemos aquí y que, en contacto con otras experiencias de fuera, se vayan haciendo potentes. También es clave el tejido de empleo inducido que se crea para la reparación y mantenimiento de equipos informáticos. Queremos traer a gente de empresas de fuera para empaparnos en todo aquello que sea novedoso y que contribuya a hacer crecer nuestro tejido empresarial», asegura el presidente de la Cámara, Conrado Merino.
La Cámara suma 17 servicios en el ‘coworking’ de su nueva sede - Foto: Sara MuniosgurenEl nuevo espacio digital en las remodeladas instalaciones de la Cámara empezó a ofrecer hace unos días de forma online y, a partir del 25 de enero de forma presencial, con su inauguración oficial, una solución práctica e innovadora para trabajar en un entorno compartido en el centro de la ciudad con todas las herramientas tecnologías necesarias para desarrollar nuevos proyectos.
DINAMIZACIÓN DIGITAL. El objetivo se centra en conseguir una dinamización digital para crear nuevas experiencias y establecer sinergias a través de la organización de actividades conjuntas.
En el apartado de las nuevas prestaciones, en la denominada Zona Doze los usuarios dispondrán de forma presencial un lugar para poder desarrollar proyectos de innovación; zona abierta de trabajo compartido en planta baja; mesas elevables para trabajo de pie; cabina insonorizada de videoconferencias; zona de descanso con butaca fonoabsorbente para llamadas y espacio para impartir distintos tipos de formación, cursos y eventos con video wall (pantalla interactiva).
La Cámara suma 17 servicios en el ‘coworking’ de su nueva sede - Foto: Sara MuniosgurenIgualmente, se habilitará una zona de demostración con expositor de tecnologías novedosas disponibles con el acompañamiento de un experto; sala conecta en despacho cerrado para reuniones de seis personas; zona de reprografía para usuarios; zona abierta de trabajo compartido en la planta primera; cuatro despachos cerrados de varios tamaños para alquiler o reuniones; taquillas disponibles para usuarios en recintos compartidos en ambas plantas y un muro multimedia para reuniones y conferencias con lado de pantalla y lado de pizarra blanca con rotulador.
La Cámara de Comercio se ha ido adaptando siempre a las necesidades de las empresas palentinas, pero ha tenido desde siempre pilares básicos inherentes a su función pública, como el de la formación para el emprendimiento y el comercio internacional. «El asesoramiento y fomento de la exportaciones sigue y vamos adaptándonos a procesos como el de la digitalización desde 2020, negocio a negocio y sector a sector. También creamos en febrero de 2004 la ventanilla única empresarial que hace las veces de cinco organismos para ejecutar todo tipo de altas y registros, y en mayo de 2007 nació el vivero de empresas», concreta Rosa González, secretaria general de la Cámara. Emilio González, responsable del área de Atención a Empresas, añade que «vamos de la mano en lo que se precisa y representamos al mundo empresarial con una ejecutiva elegida cada cuatro años integrada por profesionales de todos los ámbitos empresariales».
Una de las labores clave de la Cámara de Comercio, como parte de la red Acelera Pyme en España, es prestar apoyo personalizado gratuito a emprendedores, autónomos, micropymes y pequeñas y medianas empresas en la transformación digital de su negocio. Una labor que supone, por un lado, la puesta en marcha y el impulso a aquellos que no cuenten con una estructura tecnológica básica; y por el otro, el desarrollo y ampliación de aquellas que sí cuenten con una base tecnológica en aspectos como la comercialización de productos o servicios.
La Cámara suma 17 servicios en el ‘coworking’ de su nueva sedeFomentar la cultura digital en el entramado empresarial de la provincia es clave para el futuro del territorio. Por eso, la Cámara de Comercio se une a esta red convirtiéndose en centro demostrador de tecnología; es decir, un nexo de unión entre empresas que ofrezcan sus servicios y aquellas que requieran de soluciones para poder abordar su proceso de transformación digital.
«Somos únicos en CyL en oferta privada digitalizada»
El futuro de las cámaras, una vez que las empresas asociadas dejaron de pagar cuotas, pasa por ofrecer y gestionar servicios privados profesionales y avanzar hacia la digitalización. «Debemos combinar poco a poco la parte pública con las ayudas recibidas y pasar a la parte privada. Esta transición cada vez debe avanzar más y estamos inmersos en la generación de servicios de carácter privado», explica la secretaria general de la Cámara de Comercio, Rosa González, con 25 años de desempeño laboral. Así, se ha iniciado una apuesta decidida por la digitalización y la entidad palentina que «es la única en Castilla y León con un proyecto presentado y aprobado para crear un coworking que ahora hay que gestionar», concreta, al tiempo recuerda que la iniciativa consiguió financiación europea para mejorar la competitividad de las pymes y la prioridad en la inversión, facilitando el apoyo económico a las nuevas ideas. «Hay experiencias camerales similares en otros sitios como Barcelona, Málaga, Madrid o Sevilla», asevera.
Emilio Adán, responsable de atención a las empresas de la Cámara con 27 años de desempeño laboral, recuerda el momento en el que este tipo de corporaciones de derecho público variaron la forma de rentabilizar el trabajo que ofrecen. «La denominada Ley Zapatero de 2010 obligaba a seguir ofreciendo los mismos servicios pero suprimiendo el apoyo público existente. Las cámaras tenían que autofinanciarse con recursos propios, con distintas iniciativas y cursos formativos a distintos niveles. Fueron años difíciles al tener que ofrecer más prestaciones y el dinero no existía. De una plantilla de 12 personas se pasó a tener solo cuatro y ahora somos diez. Con una ley regional de 27 de diciembre de 2018 se pudieron llevar a cabo unas encomiendas de gestión, que son trabajos que las cámaras están obligadas por su función pública a realizar, pero por los que no se cobra. Después la Junta te abona los gastos que te ha ocasionado desarrollar esos servicios», señala.
Rosa González ahonda en ese problema que dio un giro total al funcionamiento de las entidades camerales. «Pasamos de tener unos recursos públicos suficientes a que apenas llegaran, pero supimos ajustarnos. Fuimos de las pocas cámaras que conseguimos salir adelante sin cobrar por lo que se ofrecía a los asociados, lo que sí hicieron las de mayor tamaño del país», indica.
Asimismo, apunta que «con los servicios que gestionamos actualmente somos capaces de autofinanciarnos y, hasta ahora, contando con fondos europeos, hemos conseguido no cobrar pero hubo bastantes cámaras que se vieron obligadas a cerrar. Desde fuera ya no se nos tiene que ver solo como un organismo al gestionarmos como una empresa, eso sí, sin ánimo de lucro. Pero, lógicamente, tenemos necesidad de cubrir gastos e ingresos cada año porque el sistema de cofinanciación de proyectos con fondos europeos cada vez en más frágil», concluye.
«La idea es crear una red que sujete el tejido empresarial local y crecer»
Conrado Merino, presidente de la Cámara de Palencia, señala que el proyecto de crear un coworking digital en Palencia surgió a raíz de un encuentro con su homólogo en organismo a nivel nacional, José Luis Bonet. «Se había hecho en ciudades como Valencia, Madrid y Barcelona y en Castilla y León es el primero. Consideramos que puede tener muchos apoyos, dado que gente de fuera puede exponer aquí proyectos productivos en todo tipo de actividades comerciales y empresariales. Nuestra idea es crear una red de sinergias que nos permita sujetar el tejido empresarial existente, crecer y atraer nuevas iniciativas emprendedoras», expone.
Respecto a la celebración este mes del 125 aniversario de la constitución de la Cámara de Comercio e Industria de Palencia, su actual titular reconoció el trabajo de sus 14 antecesores. «Cada uno en su etapa vivió avatares distintos y complejos. Hace más de 20 años las cuotas obligatorias dieron un fuerte impulso a las institución y al suprimirlas la conocida comoLey Zapatero llegaron momentos duros al tener que autofinanciarse. Ahora seguimos prestando servicios y asesoramiento empresarial», apunta.
A su vez, Conrado Merino recalca que la vida empresarial y montar negocios «supone tener que luchar en el día a día contra el sistema político y las instituciones gobernantes. «Los partidos de uno y otro signo son muy orgullosos y no nos escuchan. Se sienten los únicos sabios de la tierra e imponen cosas sin consultar y nunca han puesto en marcha ninguna iniciativa emprendedora. Están continuamente dando recetas sin ser doctores y viene un año difícil en el que pueden cerrarse muchas empresas, aunque estén llegando otras nuevas», dice.
precio del dinero e ICOs. El presidente de la institución cameral augura tiempos nada halagüeños para el mundo empresarial. «La mayoría de las empresas, salvo cuatro de ellas, juegan con el dinero que pueden prestar los bancos y los intereses de los préstamos están muy altos. Otro problema llegará en breve con los del Instituto de Crédito Oficial (ICO), ya que el índice de devolución es muy bajo. Hay gente que quiere abonar el 20% y que el Gobierno se haga cargo del 80% de la cantidad restante adelantada por los bancos y que pagamos todos los ciudadanos. Las entidades bancarias ponen a estas empresas en la lista roja y se acabó su financiación», concluye.