La alcaldesa de Palencia, Miriam Andrés, insiste en desmarcarse del soterramiento de Valladolid porque "no hay ninguna circunstancia semejante o parecida" entre ambas ciudades. Andrés recordó que el anterior equipo de gobierno de Valladolid descubrió que la Sociedad Valladolid Alta Velocidad tenía contraída una deuda de 400 millones de euros y fue en 2017 cuando el Ministerio de Fomento asumió esa deuda con la condición de que la ciudad pactara, con el Ministerio y con Adif, una solución. Además, dijo la alcaldesa palentina, las obras de Valladolid están "muy avanzadas" y, por lo tanto, la realidad a la que se enfrentan ambas ciudades es diferente.

Para Andrés la prioridad ahora, no es tanto el soterramiento, sino "detener las obras de la Alta Velocidad a Cantabria a su paso por la ciudad". "Ahora que ya hemos presentado el recurso contencioso administrativo, será el juez el que tenga que decidir", aseguró.

De manera paralela, el Ayuntamiento de Palencia está a la espera de que el Ministerio se pronuncie sobre el coste actualizado de un posible soterramiento. "Una vez lo tengamos, se hablará del soterramiento para decidir sobre su posibilidad o su imposibilidad", aseguró Miriam Andrés al tiempo que recordó que los Consistorios tendrán que enfrentarse a una nueva dificultad una vez se apruebe, previsiblemente antes de que termine el año, la futura Ley de Movilidad Sostenible. "Será una espada de Damocles sobre nuestra espalda porque establecerá que los ayuntamientos deberán aportar el 70 por ciento del coste del soterramiento de las vías. Por eso hay que esperar y dar ese primer paso de detener las obras de ADIF en la zona norte de la ciudad". 

Miriam Andrés está a la espera de que el Ministro de Transportes, Óscar Puente, pueda recibirla en Madrid para abordar todas las cuestiones pendientes. "Estamos en permanente contacto y hablamos pero no es fácil encontrar un hueco en su agenda. En cuanto lo tenga, se reunirán con nosotros", concluyó Andrés.