La pasión por la comedia, los monólogos y el personaje de Mr Bean fueron los detonantes que llevaron al humorista Sergio Encinas a pisar por primera vez un escenario a la temprana edad de 15 años, algo que, según detalla el propio cómico, «se veía venir en casa».
«El auge de El Club de la Comedia en 1999 y su retransmisión en Canal Plus hizo que se comenzaran a celebrar certámenes en bares y salas. La gente se animaba a participar porque tenía la oportunidad de hacer en directo lo que veía en la televisión. Ahí comencé yo, sobre el año 2001. Ya en el 2007 empezó mi etapa como profesional», explica Encinas.
Gracias a un humor nostálgico y a una gran presencia en las redes sociales con sketches que rondan el minuto de duración, el cómico vallisoletano ha conseguido cautivar a 4,3 millones de seguidores en la plataforma de TikTok y 3,6 millones en YouTube. «Ahora, para destacar, las redes sociales son todo. Antes tenías que salir en televisión para que la gente te conociera», subraya Encinas, quien también asegura que la llegada de este tipo de formatos «ha supuesto un escaparate más».
«El código es completamente diferente a la hora de actuar en directo o subir un vídeo», afirma Encinas. «Cuando estoy sobre el escenario, tengo que controlar las pausas, los ritmos o la forma de llevar a la gente. A veces hay que actuar más despacio porque el público está más relajado y otras hay que ir con todo. Sin embargo, al hacer un vídeo, soy yo y la cámara», compara. Respecto a la dificultad, el cómico confiesa que «todo es practicar». «Repetir y fallar. Hay gente que tiene mayor capacidad de aprendizaje y tarda menos, pero nadie nace con todo aprendido», añade.
El nuevo escenario humorístico, con las posibilidades que ofrecen las plataformas de vídeo, genera «incertidumbre» al cómico sobre «qué será lo siguiente». «Todo va cambiando. Cuando predominaba la radio, se pensaba que la tele iba a ser el final; después, llegó Internet; luego, los youtubers; y ahora, los streamers», describe. A pesar de los cambios, Encinas asegura que se «sube a cualquier barco».
Sus sketches, como define el propio humorista, intentan transmitir lo que él mismo ha vivido. A pesar de que muchas de sus referencias son hacia cuestiones de los años 90 y 2000, Encinas reconoce que llama la atención «a mucha gente joven». «Lo que ocurre es que el hijo que ve mis vídeos se los enseña al padre y viceversa. Esto al final queda reflejado en mis actuaciones, donde acude gente de diversas edades», matiza.
UN HABITUAL. La de hoy será la tercera actuación de Sergio Encinas en el festival del humor OMY. Sin embargo, el cómico vallisoletano es ya un habitual en la capital con sus «más de 30 actuaciones».
«Siempre intento que mi espectáculo sea una mezcla entre lo que llevo haciendo toda la vida y lo que hago en mis redes sociales. De esta manera, disfrutan los que me conocen en mis diferentes facetas», describe Encinas en relación con lo que el público verá esta noche.
«El público palentino es muy bueno. Siempre digo que me encanta el público castellano en general. La gente de fuera se sorprende porque, con lo aparentemente fríos que somos, aceptamos todo, y eso permite a los artistas hablar de cualquier cosa», explica.
En cuanto a sus previsiones futuras, Encinas afirma que quiere «seguir motivado y creciendo para seguir ahí», concluye.