A finales del pasado mes de octubre, la Junta de Castilla y León anunció el Protocolo Palencia 2030, centrado en la especialización inteligente del sector agroalimentario, una herramienta con la que buscará potenciar el desarrollo económico, logístico, emprendedor, innovador y de talento en la provincia. En total, 30 millones de euros de inversión distribuidos en cuatro áreas clave: Desarrollo industrial y logístico, Impulso al emprendimiento, Innovación abierta y Talento.

Los titulares de aquel día se centraron en la creación de la Plataforma Logística de Palencia que, con una inversión de 23 millones de euros, estará ubicada en Villamuriel de Cerrato, junto al Parque de Proveedores de Renault; y en la creación del edificio Incubatech, con una inversión de 6 millones de euros, en el polígono industrial de Magaz de Pisuerga.

Al cerrar el foco sobre esta última iniciativa, se comprueba que el plan de la Junta de Castilla y León es que este futuro edificio albergue startups (empresas emergentes) y firmas agroalimentarias, y que su intención es que a estas instalaciones de 3.800 metros cuadrados y cuatro pabellones se muden en el futuro el Centro Tecnológico Agrario y Agroalimentario (Itagra) y el Centro Tecnológico de Cereales de Castilla y León (Cetece), ambas con sede en la capital, además del Instituto para la Competitividad Empresarial (ICE) de Castilla y León, ubicado en Valladolid.

La materialización del Protocolo Palencia 2030 tendrá dos consecuencias directas para la capital. La primera, la pérdida de más de 60 puestos de trabajo. El Centro Tecnológico Agrario y Agroalimentario cuenta con una plantilla de más de 30 profesionales de diversas especialidades, a los que hay que sumar los 6 de Itagra Formación, la rama formativa de la entidad; mientras, el Centro Tecnológico de Cereales de Castilla y León (Cetece) emplea a 25 trabajadores, entre ellos un nutrido grupo de investigadores especializados en áreas como nutrición, química, tecnología de alimentos e ingeniería agronómica.

La segunda, que la ciudad perdería el papel estratégico como eje clave en el desarrollo del sector agroalimentario en la provincia. Así lo entiende el equipo de Gobierno de Miriam Andrés, que, consciente de que debe luchar por mantener estas instituciones en la capital por el impacto positivo que tienen tanto para la ciudad como para el entorno provincial, ha ofrecido al Cetece y al Itagra las instalaciones del Colegio de Huérfanas de Ferroviarios.

«Estas instalaciones tienen un gran potencial y pueden ser muy útiles para la ciudad y la provincia. Sacar al Cetece y al Itagra de la capital, en cambio, no beneficiaría ni a Palencia ni al desarrollo de su tejido industrial», opina Miriam Andrés, que sí deja claro que «en ningún caso» quiere que se piense que «el Ayuntamiento de la capital quiere quitar inversiones a la provincia». «Nada más lejos de la realidad. Pero creemos que, teniendo un espacio en el casco urbano, bien comunicado y cercano al desarrollo de un futuro polígono industrial, puede ser algo positivo tanto para la ciudad como para la provincia».

No es la primera vez que se plantea la posibilidad de utilizar el Colegio de Huérfanas de Ferroviarios para un fin similar. La primera edil recuerda que ya se planteó por parte del PSOE en la confección de la Estrategia para el Desarrollo Sostenible Urbano Integrado (Edusi). «Las instalaciones cuentan con más de 14.000 metros cuadrados que, lamentablemente, se están degradando rápidamente. Solo se podrán rehabilitar o reformar con la colaboración de varias administraciones. Además, su ubicación es estratégica, ya que está junto a un sector empresarial de suelo industrial que desarrollará el Sepes próximamente».

inclusión en la plataforma. Paralelamente a esta oferta, la alcaldesa de la ciudad también ha dirigido una carta al consejero de Economía y Hacienda de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, en la que pone de manifiesto la necesidad de «colaborar estrechamente entre las distintas administraciones públicas para fortalecer el sector agroalimentario en la provincia» y, por ello, solicita la incorporación del Ayuntamiento a la Plataforma Agroalimentaria creada por la administración regional en noviembre de 2022, con el objetivo de «sumar esfuerzos y unir sinergias».

La primera edil recuerda que en 2022, cuando el PSOE estaba en la oposición, ya urgieron al anterior alcalde, Mario Simón, a que solicitara la inclusión en esta plataforma. «Creemos que la provincia sin la ciudad y la ciudad sin la provincia no pueden tener fuerza», señala Miriam Andrés, que ahora, como alcaldesa, pretende lograr un asiento en esa plataforma.

De hecho, la regidora destaca que la colaboración entre todas las instituciones es «fundamental» para el impulso del sector agroalimentario y recalca que el trabajo conjunto y en beneficio del desarrollo de la provincia «debe ocuparnos a todos». De ahí que confíe en «poder participar activamente en los objetivos y proyectos que la Plataforma Agroalimentaria impulse en el futuro». Y es que es en este foro donde quiere y debe defender su propuesta de reunir en el antiguo Colegio de Huérfanas de Ferroviarios al Cetece y al Itagra, haciendo cambiar así la idea de la Junta.

«El nodo de las infraestructuras pasa necesariamente por nuestra ciudad», opina la regidora, para quien el Ayuntamiento es un actor fundamental para el éxito de iniciativas como la Plataforma Agroalimentaria. «No tengo nada en contra de que se invierta en la provincia, porque es bueno», insiste.

Con estas palabras, la alcaldesa muestra su plena disposición a trabajar en coordinación con la Junta y, de hecho, valora la anunciada creación de una Plataforma Logística en Villamuriel de Cerrato, el plato fuerte de ese Protocolo Palencia 2030, y que estará vinculada al Parque de Proveedores de Renault con una inversión de 23 millones de euros. Una iniciativa, recuerda, que «recoge en parte la demanda planteada por la unanimidad de los grupos políticos del Ayuntamiento de recuperar el proyecto de Cylog en esos terrenos», y, por lo tanto, tendrá un impacto positivo en el desarrollo económico y logístico de la zona.