Dos derrotas imprevistas consecutivas eran demasiadas, por eso el Súper Agropal Palencia se puso el mono de trabajo para retornar a la senda de la victoria ante el Hestia Menorca, al que superó en un esperanzador debut de Leslie Nkereuwem con la elástica colegial. Los morados supieron darle la vuelta al adverso marcador del primer periodo, llevándose los otros tres para certificar el triunfo y seguir la estela de los equipos de cabeza.

Regresaba al quinteto inicial Pablo Hernández, sustituyendo a Gnjidic, que empezaba en el banquillo, donde también esperaba la nueva incorporación, Nkereuwem. Para Vaulet eran los primeros puntos del partido, machacando Krutwig en la acción posterior. Stoilov firmaba la primera canasta menorquina, aunque el pívot norteamericano volvía a hacerse fuerte en la pintura. Cone transformaba el primer triple del encuentro para ajustar el marcador al tiempo que llegaban las primeras permutas moradas, Gnjidic y Wintering en pista. Pero McDonnell, de nuevo de tres, ponía en ventaja a Menorca por primera vez (6-8). Ovación en el pabellón para Nkereuwem, que debutaba. Dos tiros libres de Llorente, aumentando la renta, pero aparecía Vaulet con la canasta y personal para ajustar el marcador (9-10). Nkereuwem, en su primera acción, capturaba un rebote y, agresivo hacia dentro, firmaba una canasta a aro pasado de muy bella factura. Paraba entonces Javi Zamora el partido (11-10). Reaccionaba Arteaga, mientras Kunkel abría su casillero particular. Ahora sumaba Ivanov desde la línea de libres. Molins hacía lo propio y llegaban ciertos recuerdos de Zamora. Por si fuera poco, otros dos de Cone desde el mismo sitio (13-19). Cortaba el sangrado Dimitrov, pero Cone se volvía a ir a la línea de tiros libres (1-9 en el primer acto…). Los dos para dentro y final del cuarto (15-21).

Dos puntos de Kunkel para abrir el segundo, a los que respondía Molins con un triple. Luis Guil pedía el tiempo muerto (17-24). Kunkel y Borg, desde el tiro libre, y Vaulet, que se colgaba, acercaban al Súper Agropal, pero volvía a sumar Cone (otra vez después de una falta). Llegaba entonces el triple de Borg para mantener a los palentinos cerca (24-26). Y un nuevo tiempo muerto de Javi Zamora. Nkereuwem, que estaba teniendo un buen debut, jugaba ahora al cuatro, junto a Krutwig, haciendo gala de su polivalencia. Gnjidic, mientras tanto, defendiendo a su estrella, Cone. Y haciéndolo bien. Casi no se supo nada de él en el segundo periodo. Ha venido para esto, entre otras cosas. No meterá 20 puntos, pero si es capaz de secar al rival que puede hacer 30, el trabajo es notable. Conseguía una buena ventana de puntos el Súper Agropal en el tramo final, yéndose al descanso por delante en el marcador, pese a la canasta sobre la bocina de Molins (38-32).

El Súper Agropal Palencia gana en el barro - Foto: Juan MelladoCambio de quinteto tras el intermedio. Wintering y Gnjidic en vez de Oroz y Pablo. Ritmo frenético en los primeros compases, algo que, a priori, le beneficiaba al cuadro local. Aunque el marcador se movía para unos y para otros (43-38 con el triple de Borg). Arteaga apretaba el asunto. Menos mal que Cone no aprovechaba la técnica de Wintering. Vaulet daba oxígeno, pero Arteaga volvía a sumar. Momento Nkereuwem del partido, con un 2+1 muy celebrado que colocaba el 50-44. Y otros dos para el estadounidense con pasaporte nigeriano. Golpes en el pecho para celebrar que en su estreno estaba siendo, hasta ahora, el máximo anotador con 11 puntos. Los visitantes estaban aturdidos y lo aprovechaba Pablo Hernández para hacer el 54-46. Ocho arriba para el Súper Agropal y tiempo muerto menorquín. Nkereuwem había agitado el argumento. Otro rebote y asistencia para él, y triple de Kunkel (57-46). Un triple de Pablo Hernández cerraba el periodo (60-49).

Los morados habían conseguido abrir brecha y encaminar la victoria, pero había que rematar la cosa. Lo intentaba impedir Cone, de tres, acortando la diferencia, que era de diez puntos. Nkereuwem, de todos los colores, ahora en el alley-oop de Oroz. Javi Zamora volvía a parar el partido tras la canasta de Dimitrov (67-52 a 7'25"). Menorca intentaba quemar sus últimos cartuchos, pero se lo impedía un Súper Agropal que ya había metido la sexta marcha para cerrar cuanto antes el triunfo, rondando la renta los 20 puntos. Restaban tres minutos cuando Luis Guil se marchaba expulsado ante el absoluto enfado del pabellón con el trío arbitral. Pese a que los visitantes redujeron la diferencia en los compases finales, no fue suficiente para evitar el regreso a la victoria de los colegiales (84-72).