El pleno del Ayuntamiento aprobó ayer los pliegos de cláusulas administrativas y técnicas, el expediente de contratación y el gasto del próximo contrato del servicio de limpieza urbana y recogida selectiva domiciliaria de basuras, el cual supondrá una inversión de 82.982.337,85€ (IVA incluido) a lo largo de su duración de una década. «Este contrato es mejor que el actual, se ajusta a las necesidades de Palencia, hace frente al incremento de los costes en el combustible y el personal y llega tras la aprobación de un presupuesto que lo dota económicamente de forma suficiente», aseguró el alcalde, Mario Simón.
Una valoración que no compartió la oposición, que optó por la abstención (Vox y PSOE) o, directamente, por el no, como fue el caso de Ganemos. Para estos grupos políticos, «las prisas» o la falta de un «hilado más fino» de las condiciones que se pondrán a las empresas que se quieran hacer con el contrato más importante del Consistorio impidieron respaldarlo.
Desde la bancada socialista, Álvaro Bilbao llamó la atención sobre las dos observaciones que marca el servicio de Intervención en su informa de fiscalización. La primera es que «el reparto de puntuación en relación a la valoración del presupuesto ofertado no garantiza la elección de la oferta más ventajosa económicamente» y la segunda es que «si bien se establecen los criterios de valoración de los apartados de criterios subjetivos (...) existe ausencia de desglose interno de puntuaciones».
Bilbao explicó que si dos empresas presentan una oferta técnica y obtienen la misma puntuación, puede darse el caso de que sume más puntos y, por lo tanto, resulte ganadora del concurso público aquella que realice una oferta económica menos ventajosa. Esto es, detalló, porque el pliego deja abierta una puerta a que sea posible jugar con el porcentaje a la baja respecto al presupuesto base de licitación y con el diferencial con respecto al euríbor anual de las amortizaciones.
«Se daría una situación en la que el Ayuntamiento estaría incumpliendo la Ley de Contratos del Sector Público, al no elegir a la empresa con la oferta económica más ventajosa», concluyó el concejal del PSOE.
El alcalde, Mario Simón, aseguró que ese escenario es «muy difícil por no decir imposible» que se dé, ya que ningún gestor de una empresa interesada en este contrato haría una oferta con esas características. «En este salón de plenos se ha dicho muchas veces que en un contrato no todo es la cuantía económica, y que también es importante valorar la memoria, las actividades y los itinerarios que propone la empresas. Es decir, la calidad por encima de la cantidad», alegó.
Vox, por su parte, motivó su abstención en la prácticamente nula posibilidad que han tenido de influir en los pliegos con sus aportaciones. «Tenemos dudas razonables y estaremos atentos al proceso de licitación porque hay cuestiones que no están aquilatadas como la ausencia de un anexo con las instalaciones deportivas que tendrá que limpiar la empresa», aseveró su portavoz, Sonia Lalanda.
«Es el pliego más importante del Ayuntamiento, el que permite elaborar la carta de presentación de la ciudad, y de repente, cuando tenía que estar adjudicado desde hace un años, lo licitan deprisa y corriendo», objetó también la edil de Vox.
El voto negativo por el que optó Ganemos, se centró en las críticas expuestas lo últimos días. Cuestiones como que «una duración de 10 años no está justificada», «no superará todas las deficiencias actuales del servicio» o que «no se especifican las calles en las que tiene que prestar el servicio la nueva empresa» ni «el destino de los residuos del nuevo contenedor marrón de exclusivo para residuos orgánicos».
El concejal de Medio Ambiente, Juan Antonio Marcos, dio respuesta a algunas de ellas, como que «el plazo de una década facilita la amortización de la maquinaria por parte de la empresa», que «delimitar por zonas la limpieza impedirá que se deje fuera alguna calle» y que «los biorresiduos se van a compostar con los restos de poda y césped».
Sin más debate, llegó el momento de las votaciones. Tan solo los grupos del equipo de Gobierno, Partido Popular y Ciudadanos, votaron a favor de la aprobación de los pliegos, suficiente para comenzar su licitación.
Cabe recordar que el presupuesto de licitación total del contrato es de 82.982.337,85€ (IVA incluido), el cual se desglosa en dos lotes: la limpieza viaria y recogida de basura (82.953.712,60 euros por 10 años) y la gestión del aceite usado (28.625,25 euros por 5 años). También que la principal novedad es que la ciudad incorporará la recogida selectiva de biorresiduos domésticos en al menos 240 contenedores marrones, que serán financiados gracias a los fondos europeos Next Generation y a través de la Junta, que ya ha entregado al Ayuntamiento 275.000 euros este año y que dará otros 225.000 el que viene.