Construir una enorme mole metálica de varias decenas de toneladas no tuvo que ser nada fácil allá por 1940 cuando se construyeron las compuertas de la presa del embalse de La Requejada, en el término municipal de Cervera de Pisuerga. Sustituirlas ahora, la friolera de 84 años después, está siendo una tarea tanto o más complicada que entonces.
El principal contratiempo no es ahora, ni mucho menos, la construcción de las mismas. Si hace ocho décadas y media se pudo hacer, ahora los avances en tecnología y maquinaria, hacen pensar que esta tarea puede resultar mucho más sencilla.
El problema radica, tal y como han confirmado los vecinos de la comarca norteña a Diario Palentino, en el transporte de las compuertas hasta el lugar. Como solución más plausible en este momento, los responsables de los trabajos de mejora de la infraestructura se estarían pantano abrir una roza de grandes dimensiones (una pista de tierra)en pleno Parque Natural Montaña Palentina para que pueda discurrir por ella un trailer.
Esta podría tener dos recorridos posibles. El primero discurriría por las localidades de Arbejal y Resoba (por la zona izquierda, a pie de presa); mientras que el segundo lo haría a través de las desaparecidas Vañes y Villanueva de Vañes (por la carretera de Polentinos), según las fuentes consultadas por este periódico.
En ambos casos la pista atravesaría montes de utilidad pública sin ninguna protección especial más allá de la de encontrarse dentro del Parque Natural, pues se trata de zonas repletas de pinos maderables. «La solución, desde luego, se antoja complicada. Llevan más de un año para completar la obra», confirman estas mismas fuentes.
Y es que, las carreteras que discurren hasta el pantano son muy estrechas e impiden el tránsito de un camión de gran tonelaje como el que sería necesario para llevar los dispositivos hasta el lugar. En concreto, se trata de la CL-627 (Cervera de Pisuerga-límite con Cantabria) y la PP-2179, pertenecientes la primera a la Red Autonómica de Carreteras y la segunda a la Provincial. Tampoco es posible hacerlo por vía aérea con la ayuda de un helicóptero de gran capacidad, por el gran tonelaje de los dispositivos.
Con todos estos datos, todo parece indicar que cuando se levantó la presa las compuertas se construyeron in situ, a pie de embalse. Sin embargo, en esta ocasión se ha optado por traerlas ya armadas desde el taller donde se han construido, lo que dificulta enormemente el trabajo.