Galletas Gullón superará la barrera de los 2.000 empleados con una evolución meteórica en los últimos años. ¿Cómo lo han conseguido?

El ascenso de trabajo es impresionante. Durante el último lustro hemos estado creando más de cien puestos de trabajo cada año de forma continuada. 

Tenemos un producto de éxito en el mercado nacional que exportamos a otros países. Como es vendible prácticamente en todos los países, nos está llevando a una expansión de la compañía aparejada a la creación de nuevos puestos de trabajo de manera progresiva.

¿Qué busca Gullón en sus empleados y que les ofrece la compañía?

Del trabajador buscamos buenas personas, que entiendan que hay que competir con el resto del mundo, que tienen que hacer bien su trabajo y que sean responsables. El que viene con formación tiene ese camino ya hecho y para el que no, tenemos los mecanismos adecuados para hacerlo. De hecho, en los últimos años hemos formado a más de 280 personas a través del Cetece, que imparte unas clases específicas para el sector agroalimentario. 

Venir a trabajar no solo es acudir a tu puesto ocho horas y recibir un salario; es formar parte de un grupo que tiene que competir con todos los galleteros del mundo. Queremos que se sientan importantes dentro de una empresa familiar que quiere seguir expansionándose.

¿A qué puestos de incorporarán estos nuevos trabajadores?

Trabajarán en VIDA II, donde estamos realizando todas las inversiones ahora. Estamos apostando por líneas modernas para exportar. Todo el dinero que genera Gullón se está invirtiendo allí.

Son el gran generador de empleo y riqueza en la Montaña Palentina, en el resto de la provincia y también en la vecina Cantabria. ¿Qué supone eso para la firma?

Nos sentimos muy orgullosos y estamos cumpliendo con nuestra función principal, que es arrimar el hombro en esta tierra y solo lo sabemos hacer creando empleo. Estamos muy satisfechos de tener la responsabilidad de ser una empresa que lucha, crea puestos de trabajo y es capaz de hacer un producto exportable a todos los países del mundo. 

¿Hasta que punto ha repercutido la puesta en marcha de VIDA a la hora de aumentar la plantilla?

VIDA es un balón de oxígeno para la compañía; representa el futuro, la continuidad de nuestra empresa y lo que nos va a dar estabilidad durante los próximos años. Con ella nos fortalecemos y ganamos músculo de cara a Europa. Hoy representa a casi un tercio de los trabajadores del grupo y con estas nuevas 300 personas que se incorporarán de aquí a marzo va a llegar casi a la mitad.

El crecimiento de la compañía ha sido posible tradicionalmente gracias a su reinversión de beneficios. ¿Mantendrán está política?

Una de las características de la empresa es reinvertir todos los beneficios, al menos en los 37 años que yo llevo de director. Esto hace que si tienes proyecto, tienes países donde vender y reinviertes para poner en marcha nuevas líneas de producción, se consigue seguir creciendo y el ascenso de los contratados.

Crecer por crecer no tiene sentido. Nosotros cada año vamos invirtiendo y asentando todo lo que hemos conseguido el año anterior en nuevas líneas de producción o en estructura de la compañía. Ese es el crecimiento que necesitamos, el que nos gusta y el que hacemos.

¿Está ese futuro vinculado directamente al sector de la galleta salud?

La base de nuestro negocio radica en la calidad de la materia prima y, además, la evolución de la sociedad coincide con nuestro proyecto de una vida saludable. Hay proyecto para seguir creciendo.

¿Cuáles son las previsiones con las que cerrarán la facturación?

Faltan octubre, noviembre, que son dos de los mejores meses para el sector galletero, y diciembre, pero ya puedo avanzar que habrá un crecimiento sobre el año anterior.

¿Llegarán a nuevos mercados?

Estamos presentes en 126 países, todos los que pueden mantener un mercado estable. Hay proyecto y hay países en los que cuando llegamos con los productos saludables somos una empresa fresca donde podemos competir.

¿En qué país tienen más éxito sus productos fuera de España?

Portugal, que es prácticamente una continuidad de España y donde trabajan casi todos los operadores de España. Allí somos la primera marca de galletas, por encima de las grandes multinacionales. 

¿En qué medida les ha beneficiado la línea transversal de autobús que puso en marcha la Diputación entre Guardo, Cervera y Aguilar, que suma ya más de 200.000 usuarios?

La Diputación ha sido muy sabia y ha leído muy bien la necesidad que existía en materia de transporte. Desde Guardo, por ejemplo, vienen más de 150 personas a trabajar, y estas líneas nos han beneficiado muchísimo porque se evitan accidentes y se reduce la carga económica del desplazamiento. Es una de las cosas que más agradecemos.

¿Cuál es su compromiso con la plantilla?

Tenemos la responsabilidad de mirar por esta  parte de la provincia, y lo hacemos creando empleo. Nuestro objetivo es que los trabajadores tengan un buen nivel salarial, que estén satisfechos y que les mejoremos la calidad de vida. Galletas Gullón es uno de los mejores salarios de la industria española y estamos muy satisfechos.

Parte de esa captación de talento procede de la Lanzaderas de Empleo, que está misma semana ha premiado su compromiso con la generación de empleo. ¿Cómo valora estás iniciativas?

Necesitamos que nos vean como una empresa justa, que sabe hacer las cosas bien y en la que la gente esté satisfecha. Tenemos claro que hemos nacido en Aguilar, que la riqueza tiene que estar aquí, crear empleo y que nuestros trabajadores se sienten a gusto.