El Ayuntamiento celebrará el lunes un pleno extraordinario en el que llevará a cabo la reorganización de su organización política tras los cambios producidos en los últimos meses: la salida de la Corporación de la edil Reyes Bodero, la toma de posesión de Leire Montero en su lugar y, sobre todo, la expulsión de Ricardo Carrancio del grupo municipal de Vox y su consideración como concejal no adscrito.

Aunque en un principio la propia alcaldesa, Miriam Andrés, anunció que Carrancio iba a tener voz y voto en todas las comisiones informativas, y que este órgano, que tiene por objeto el estudio, informe o consulta de los asuntos municipales, iba a pasar de tener ocho a 11 miembros con la incorporación del nuevo edil adscrito y, además, de uno más por el PSOE y otro por el PP, finalmente no va a ser así. 

Tras negociar con el grupo municipal de Vox y con el propio Ricardo Carrancio, y tras girar consulta con la Secretaría General, la propuesta que irá el lunes al pleno será la de que el edil no adscrito participe en tres de las diez comisiones informativas que existen en el Ayuntamiento, nueve si se tiene en cuenta que la vinculada a la Edusi -finalizada en diciembre- ya ha terminado su trabajo. 

Carrancio formará parte con voz y voto de las comisiones de Impulso Económico, Empleo y Comercio; Bienestar Social, Participación Ciudadana, Barrios y Juventud; y Seguridad Ciudadana, Movilidad y Tráfico. A las otras podrá acudir pero sin derecho a voto, ya que su obligación como concejal es la de estar suficientemente informado de los asuntos municipales para emitir su voto durante el pleno.

En esas tres comisiones, Carrancio coincidirá con sus excompañeros de Vox, por lo que su voto estará ponderado: la posición que adopten Sonia Lalanda y Emilio Polo valdrá el 66,7% y la del concejal no adscrito, el 33,3 por ciento.

Leire Montero. La incorporación de la nueva concejala del PSOE, Leire Montero, como delegada del Servicio de Organización, Régimen Interior, Patrimonio, Atención al Ciudadano, Transparencia, Gestión Documental y Archivo, Cementerio y Actividades Funerarias también obliga a reestructurar algunas comisiones. En concreto, la nueva concejala formará parte de las de Contratación y Patrimonio; e Impulso Económico, Empleo y Comercio. 

Al pleno va también una propuesta para otorgar a la nueva munícipe una dedicación exclusiva, por lo que el Ayuntamiento pasará a pagar 13 sueldos, dos de ellos parciales. De esta forma, Leire Montero va a percibir un sueldo íntegro anual de 51.255 euros repartido en 14 mensualidades. Así las cosas, en la Corporación actual tienen dedicación exclusiva la alcaldesa, Miriam Andrés, que cobra 53.265 euros al año; los cinco concejales del PSOE que son delegados de área (52.259,88 euros); los dos que son delegados de servicio,  incluía Montero, (51.255 euros); un concejal del PP, otro de Vox y otro de ¡Vamos Palencia! (50.249 euros).

Además, el concejal de Izquierda Unida-Podemos percibe el 75% de una dedicación (37.687,44 euros); y otro edil del PP, el 50 por ciento (25.125 euros).

David Hierro asegura que la condena del exedil de Vox «no importa a los palentinos»

El secretario y portavoz adjunto del grupo Vox en las Cortes de Castilla y León, David Hierro, cree que la condena al que fuera concejal de esta formación Ricardo Carrancio, por agredir a una persona con discapacidad y llamarla «puto cojo», se trata de un asunto que «no importa a los palentinos». «A los ciudadanos lo que les interesa es tener agua en sus plantaciones, disponer de una unidad de radioterapia después de 17 años de promesas o que las escuelas estén en buen estado. No les importan cuestiones de enfrentamientos entre vecinos y eso es lo que fue», declaró ayer en Palencia.

Hierro criticó, además, la labor de los medios de comunicación por intentar convertir lo sucedido en «cuestiones de Sálvame». Así respondió el procurador al hecho de que Ricardo Carrancio haya sido expulsado del grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento como respuesta a la sentencia condenatoria, su reprobación por el pleno y su negativa a dimitir de su cargo.

Una salida que estuvo acompañada de un cruce de acusaciones e, incluso, descalificaciones personales entre la portavoz de Vox en el Consistorio, Sonia Lalanda, y el ya edil no adscrito, que aunque está ya fuera del grupo municipal parece que continuará representando a Vox en la Diptuación o, al menos así se deduce de las declaraciones de Hierro: «Se le ha expulsado por tener un conflicto entre vecinos. Estirar el chicle no lleva a nada».

El procurador por Palencia también desmintió que exista una crisis en el seno del partido a nivel provincial. Aseguró que Vox goza «de buena salud» en Palencia pese a que la ruptura entre el grupo municipal y la estructura provincial ha quedado patente públicamente en más de una ocasión.