Se van a unir a través de una pasarela dos zonas separadas por el río Pisuerga en  Valladolid, de dos municipios distintos, Arroyo de la Encomienda y el Valladolid del viejo camino a Simancas. El puente mezclará la Casa de la Música, el Teatro, el parque de las Castañuelas, las urbanizaciones y centros comerciales novísimos de Arroyo, con zonas deportivas, verdes, escolares, la escuela superior de imagen y sonido de Valladolid, que cuelgan del antiguo eje, la carretera que finaliza en Simancas, como preciadas uvas de racimo. 
Dos barrios con alma propia, donde cada uno prestará funciones al otro para evitar duplicidades innecesarias. Una pasarela peatonal y ciclista que integrará y potenciará los ejes de conexión, las sendas urbanas y preservará estableciendo nuevas jerarquías en las zonas verdes; fomentará rehabilitaciones y otorgará la posibilidad utilizar para   usos comerciales lucrativos, de forma transitoria, a parcelas vacías de uso.
Son barrios residenciales que hacen vivir a los ciudadanos una aventura nueva, sin sobresaltos ni estridencias, donde de mañana se tome café con un pincho de tortilla de patata y cecina, o deguste una caña con el periódico en mano, mientras los niños jueguen en las pistas protegidas, o los maduros y jóvenes acuerden salir en noche de fiesta.
Y en el camino viejo de Simancas ya no estará tan sola la antigua finca avícola de los Pardo, la hoy urbanización de unifamiliares de Entrepinos de 5.300 habitantes, ni urbanizaciones como la de Santa Ana en Valladolid. Y se podrán vincular de hecho, dos campos de golf de 18 hoyos. Gracias a este paso ahora, el bus de Arroyo tiene parada en el Campus Miguel Delibes para los universitarios. Y formarán área metropolitana conexa Valladolid y Arroyo
Fue un abrazo de los alcaldes Sarbelio Fernández, de Arroyo, con el de Valladolid, Jesús Julio Carnero. 
Y mientras, Palencia no facilita la unión de las dos márgenes del Carrión por mostrar una imagen del siglo XlX inexistente, la de una orilla derecha de huertas, que nunca fue ni será. Palencia así se queda rezagada en su futuro. 
A Arroyo y a la Alcaldía de Valladolid con sus gestores, mi enhorabuena.