Las fiestas de San Antolín vuelven a traer a la capital la Feria de Artesanía. La inauguración de la vigesimo quinta edición dió comienzo ayer con sus 43 talleres (frente a los 32 del año pasado) destinados a los oficios artesanos y artísiticos y sus productos.
Realizada por la Federación de Organizaciones Artesanas de Castilla y León (Foacal) en colaboración con el Ayuntamiento y el Ejecutivo autonómico, la feria «representa un valor añadido a medio plazo», detalló la alcadesa de la ciudad, Miriam Andrés, que señaló la «calidad, el cariño y el sentido» de los productos artesanales creados con «las mandos de la gente y con su sensibilidad particular», y consideró que deben de ser «valorados y fomentados» por las administraciones públicas.
Por su parte, la consejera de Industria, Comercio y Empleo de la Junta, Leticia García, que acompañó a la acladesa en la inauguración destacó el «carácter positivo» del sector de la artesanía en la lucha contra la despoblación y en el impulso de la generación económica, dado que el 65 % de los 586 talleres contabilizados en la comunidad están ubicados en el medio rural. En total, el sector engloba a más de 6.000 personas y 2.500 artesanos registrados.
La consejera señaló también «la incidencia que se produce en este sector, tanto en el ámbito económico, como en el cultural y el de innovación». Además, García agradeció el esfuerzo de los artesanos por su innovación al aportar técnicas y herramientas, recalcando «ese plus de calidad, de exclusividad y de diferenciación de otros productos».
Finalmente, Miriam Andrés recordó que esta cita es muy conocida y demandada por los propios artesanos que «al final no tienen plazas y sitio material para dar espacio a los que quieren participar».
La feria permanecrá abierta hasta el lunes 2 de septiembre en el Paseo del Salón Isabel II de 11 a 14,30 horas y de 18 a 22,30 horas