Monzón de Campos cuenta las horas que restan para uno de sus eventos más destacados del año: la fiesta de San Blas y su tradicional Torneo Nabero. Un evento que combina a la perfección el pasado vinculado a su «hortaliza estrella», el presente en forma de acto de exaltación a lo largo del fin de semana y el futuro toda vez que se consiga la marca de calidad Nabos de Monzón.
Y es que, según destacó el alcalde, Mariano Martínez, «antes que remolacha había nabos, y por eso hay ese empeño desde el Ayuntamiento de recuperarlo». El primer paso fueron los ensayos realizados por el Itagra en el marco del convenio con la Diputación, de los que ya dio cuenta Diario Palentino, en los que eligió a bola de nieve como la variedad que mejor se adapta al terreno y el clima de la ribera del Carrión.
Ahora se están dando los pasos para la marca de calidad. Una distinción que el primer edil terracampino asume como un «reto», pero en el que el Consistorio va a echar los restos para captar nuevos agricultores que se animen a cultivarlo en sus fincas. Será el propio Ayuntamiento el que lidere el proyecto, que no solo se circunscribirá a Monzón, sino también a las localidades vecinas de Ribas de Campos, San Cebrián de Campos y Husillos.
TORNEO NABERO
En lo que se refiere a la fiesta en sí, Martínez destacó durante la puesta de largo la gran afluencia de un evento que calificó de «distinto, divertido y muy participativo que se sale de lo común». De ahí la gran afluencia de público que asiste a esta celebración en la que van de la mano el Ayuntamiento y el Centro de Iniciativas Turísticas (CIT) Bajo Carrión y Ucieza.
El evento estrella llegará el sábado, a las 19 horas. Se trata del Torneo Nabero, en el que se elegirá al Mejor ojo del condado entre quien acierte «a bulto» el peso de una serie de cestos llenos de nabos. En total, se pondrán en juego 300 euros en premios: 150 para el ganador, 100 para el subcampeón y 50 para el tercer clasificado, todos ellos con trofeo.
El evento reúne en cada edición a decenas de espectadores en la carpa instalada para tal efecto en la plaza Mayor, donde también se da un buen número de participantes. El año pasado fueron 300, cifra que la organización espera superar esta edición. El certamen servirá igualmente para distinguir con el título de Pesador oficial de nabos, que recaerá en al agricultor José Carlos González, de Ribas.