Los diez lugares de Andrea Antón, ingeniera

PASIONES: Cualquier actividad en la montaña, la costura, los juegos de mesa y disfrutar de la compañía de sus familiares y amigos.

TRAYECTORIA: Ingeniera por la Universidad de Salamanca (USAL), residió en diversas ciudades de España hasta que hace dos años se instaló en Palencia «sin la intención de volver a irme».

1. Villaherreros.  Es el pueblo de mi familia materna y,  desde siempre, mi pueblo. Se encuentra ubicado entre las localidades de Carrión de los Condes y Osorno, en la llanura de Tierra de Campos. Cualquier persona que me conoce sabe, sin ninguna duda, que es mi lugar favorito y al que acudo en cuanto tengo unos días libres. Me encanta dar un paseo por el campo pensando en cómo han cambiado los colores desde la estación anterior o recorrer la ruta de murales que poco a poco están decorando las calles del pueblo. Nunca falto a ninguna de las fiestas, ni las patronales ni las que luego hemos creado nosotros, porque a todos los villaherrerenses nos gusta mucho festejar, y mucho más si es en el pueblo».

2. Bodegas de San Pedro. «Situadas a un kilómetro y poco de Villaherreros en lo alto de una pequeña cima, desde donde se puede apreciar con claridad la Montaña Palentina en un día despejado. Es nuestro lugar de reunión para almorzar, comer o cenar y el punto desde donde hemos disfrutado de atardeceres infinitos y de algunos amaneceres. Desde hace unos años se creó la Fiesta de las Bodegas, un día en el que vecinos y allegados a mi pueblo subimos para comer juntos y celebrar la suerte que tenemos de poder disfrutar de estas joyas de la arquitectura popular año tras año».

3. Saldaña.  «En la capital de La Vega viví hasta que me fui a estudiar a la universidad. Esta localidad me recuerda a mi infancia y juventud y, por ello, aún conservo muchos amigos de allí. Es un pueblo precioso, por el que tengo especial debilidad y al que vuelvo siempre que puedo. La plaza Vieja, el parque Javier Cortes y, por supuesto, la ermita de la Virgen del Valle, la patrona, siempre serán mis lugares favoritos».

4. San Cebrián de Campos.  «Es el pueblo de mi padre y es conocido por tener mil fiestas. Entre otros muchos recuerdos que tengo de esta localidad, destaco el de los Quintos, una tradición muy arraigada y que año tras año sigue moviendo a todo el pueblo. Ser quinta en San Cebrián de Campos fue una de las experiencias que marcaron mi juventud y que guardo con mucho cariño».

5. Carrión de los Condes. «Esta localidad viene a ser como mi lugar de adopción ya que es donde ahora viven mis padres. Subir paseando hasta la ermita de Belén para ver el atardecer antes de tomar unas cañas, madrugar para crear alfombras florales en el día del Corpus Christi o salir corriendo el día de San Zoilo para ver bailar al santo patrono son tradiciones que año tras año siguen siendo parte de mi vida. Este pueblo situado en un punto estratégico del Camino de Santiago está lleno de monumentos e iglesias que adornan sus preciosas calles».

6. Parque del Sotillo.  «Palencia es ahora mi ciudad y, poco a poco, voy dejando de sentirme nueva aquí. Si tengo que destacar un lugar, ese es sin duda el parque del Sotillo, por donde paseo cada día con mi perro. Me gusta mucho cruzar Puentecillas y adentrarme en ese espacio verde en el centro de la ciudad. Además, es donde se celebra el Palencia Sonora, que es un festival de música que me encanta».

7. Valle de Recuevas.  «Está a un kilómetro de Gama y a seis de Aguilar y es de mis sitios favoritos en la Montaña Palentina. Además, para mí es la mejor zona de escalada deportiva de la provincia. Es un enclave precioso lleno de vegetación con más de 20 sectores de escalada para todos los niveles. Es una suerte tener algo así tan cerca de casa».

8. Centro social La Ratonera de Venta de Baños.  «Conocimos este proyecto gracias a unos amigos y enseguida nos gustó la idea. El centro social La Ratonera de Venta de Baños es un lugar lleno de actividades culturales, deportivas y sociales. Y siempre con buen ambiente. Me gusta mucho participar en todas ellas y ayudar en lo que pueda para que siga funcionando tan bien».

9. Valle de Pineda.  «Situado en el norte de Palencia y en el límite con León y Cantabria, se trata de una zona de alta montaña a los pies del imponente Curavacas y recorrido por el río Carrión. Es, bajo mi punto de vista, uno de los sitios más mágicos de la Montaña Palentina desde donde se pueden iniciar muchas rutas y ascensiones, o simplemente dar un paseo observando la naturaleza de la zona».

10. La Ruta de los Pantanos.   «Es el comodín de domingo de mis padres. No sabría decir cuantas veces hemos hecho esta ruta.  Subiendo por Velilla, con primera parada en el embalse de Compuerto y, un poco después, el de Camporredondo, que son los dos que vierten las aguas al río Carrión. El itinerario sigue por la carretera que va hasta Cervera de Pisuerga, donde está el pantano de Ruesga y después el de Requejada. Para terminar, el pantano de Aguilar, donde además si hacía buen día nos dábamos un baño».