Un nutrido auditorio arropó ayer con su presencia la presentación del libro Palencia insólita II, de Gonzalo Ortega Aragón (1942-2018), coeditado a manera de «merecido homenaje» por la Institución Tello Téllez de Meneses-Academia Palentina de Historia, Letras y Bellas Artes y el sello editorial palentino Cálamo.

La publicación está prologada por el académico de la Tello Téllez, poeta y escritor Marcelino García Velasco, quien explicó sobre Palencia insólita II  que reúne anécdotas que, quien también fuera miembro de la institución y redactor jefe de Diario Palentino, «encuentra por libros, tradición oral... era muy natural hablando pero siempre acababa con un tono de humor. Esa es la madre del cordero del libro, sobre todo el lenguaje, un lenguaje rural a medias del Cerrato y de Tierra de Campos». También hizo referencia a que la Tello Téllez decidió publicar este libro porque ya existía una primera entrega. «Fui yo el culpable, elegí este, que es inédito.  Gonzalo Ortega parece que tenía intención de publicarlo, y es que tras una página en la que ponía Palencia insólita estaban estos cincuenta artículos». 

El valor de la publicación reside en que «permite conocer un tiempo que nosotros ahora no pensaríamos nunca que eso podía existir, pero sí, hasta hace días», comentó García Velasco, que incidió en que «son anécdotas de ayer, de anteayer y de casi hoy, que pueden interesar a cualquiera, también a los jóvenes para que se pongan al día cómo era de gordo -en el mal sentido- el tiempo de ayer»

En Palencia insólita II,el lector descubrirá, entre otras muchas curiosidades, quién compró el primer coche en Palencia o por qué esta provincia fue pionera en la pirotecnia en España; conocerá cuál fue el milagro del cardenal Cisneros en Villaumbrales o por qué la gran boda del siglo no llegó a celebrarse en Carrión de los Condes. También tendrá noticia de la costosa estancia del rey Fernando VII en la capital, de por qué se concedían indulgencias en Villarrabé por cambiar de peinado o de las bodas a escote en Castromocho para evitar gorrones. Las torres de Fuentes de Nava y El Escorial, El panecillo de Ramón Gómez de la Serna y El pie de san Lorenzo, de Husillos al Escorial son otros de los artículos.

Por parte de Cálamo, José Ángel Zapetero comentó que la publicación de este libro era una «deuda» que tenía con Ortega Aragón.