Detectada la presencia de avispa asiática en 88 pueblos

DP
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La Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal señala que en otros 80 municipios sobre el total de 191 no se ha confirmado pero pudiera esperarse en breve la vista de la evolución del insecto invasor

Detectada la presencia de avispa asiática en 88 pueblos

La Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal, que depende de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, ha actualizado la zonificación para realizar trampeos  de la avispa asiática, donde se pone de manifiesto que una amplia extensión de la provincia de Palencia cuenta con presencia confirmada o probable de la temible avispa asiática.

Desde la propia Junta organizaciones agrarias como Asaja se señala que se trata de un insecto invasor. «Es fatal para nuestras abejas y muy peligroso para las personas, siendo altamente recomendable dar aviso si se encuentra algún nido y no acercarse a él para que no se sientan atacadas», apunta la organización agraria. 

 A través de un mapa de zonificación realizado por  la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal, de los 191 municipios de la provincia de Palencia, 80 encuentran en cuadrículas con distintos colores donde se ha confirmado la presencia de avispa asiática y otros 88 en cuadrículas donde no se ha confirmado pero pudiera esperarse en breve la vista de la evolución del insecto invasor detectada.

color identificativo. La avispa asiática se caracteriza por un distinguible color negro con algunos segmentos amarillos y un abdomen con trazos amarillos y anaranjados. Su tamaño es superior al de las abejas y las avispas y tienen unas características patas oscuras con terminación amarilla. La avispa asiática se comporta como especie invasora en Europa desde que llegara al suroeste francés en 2004 en un barco de carga procedente del continente asiático. Desde entonces, los intentos para frenar su expansión no cesan en todo el país.

En este sentido, la Junta desarrolla desde 2019 un protocolo de actuación con un plan concreto de acciones, más cuando en la comunidad la presencia de ejemplares está constatada y, a la vista de su evolución, se espera que puedan llegar a más zonas. Entre las intervenciones puestas en marcha se encuentra el trampeo, esto es, la colocación de trampas que contienen un líquido atrayente en las cercanías de explotaciones apícolas elegidas, siempre según los criterios profesionales y con la colaboración de los apicultores, que conocen de cerca esta situación.