Los votos del Partido Popular, Ciudadanos y Vox sacaron ayer adelante la aprobación de la primera fase del proyecto de recuperación medioambiental e integración social del río Carrión a su paso por la ciudad. Un conjunto de actuaciones que suponen una inversión máxima de 694.580 euros, la mitad financiados por los fondos europeos de la Edusi, y que responden a la antigua tercera fase del Plan de Riberas.
Ni Ganemos ni el PSOE apoyaron el proyecto por las dudas que, en su opinión, genera la propuesta del equipo de Gobierno. Los socialistas, que optaron por la abstención, aseguran que están a la espera de los informes que solicitaron en la comisión de Obras. «Cuando los tengamos decidiremos si votar a favor o en contra, pero si cuando se adjudique la actuación no están en el expediente no opondremos a la adjudicación», aseveró su portavoz, Miriam Andrés.
Los socialistas, concretamente, echan de menos el pronunciamiento de los técnicos municipales sobre tres cuestiones concretas. En primer lugar, sobre planeamiento y gestión urbanística, ya que «el cauce del río Carrión cuenta con un grado de protección muy alto, según el Plan General de Ordenación Urbana». En segundo lugar, reclaman un informe del servicio de Medio Ambiente sobre el impacto en la arboleda y vegetación propia de ribera que existe, ya que temen «un esquilmado parecido al ya ejecutado entre el puente de Sandoval y el Mayor». Y, en tercer lugar, la opinión de la Confederación Hidrográfica del Duero sobre la modificación de la sección del cauce, algo que creemos va en contra de sus criterios.
Por su parte, Ganemos optó por el voto en contra. «El proyecto nos parece una buena idea pero tenemos dudas sobre algunas partes. Por ejemplo, el trazado del camino para peatones y el carril-bici atraviesa una chopera y en ningún sitio se define cómo se va a realizar la tala ni a cuántos ejemplares afectará», explica Sonia Ordóñez, portavoz de este grupo municipal.
Además, advierte sobre ausencias «importantes» en el expediente, en relación a la posición de la CHDsobre el proyecto o los informes de los servicios municipales de Urbanismo y Medio Ambiente al respecto. «Además, un tramo discurre por una propiedad privada que el Ayuntamiento tiene que expropiar y no queda claro si se puede llevar a cabo», añadió la edil.
El sí de Vox estuvo condicionado: «Es un sí con un pero. Nuestro empeño es que empiecen ya de una vez actuaciones importantes en la ribera del río. La objeción es porque vamos a seguir muy de cerca la ejecución del proyecto, ya que tenemos la mala experiencia de que las obras públicas tienen bastante que desear en la ciudad», sostuvo la portavoz de este grupo municipal, Sonia Lalanda.
Para el equipo de Gobierno de PP y Cs, la actuación «ofrece a los ciudadanos la posibilidad de disfrutar de un área natural que ahora se encuentra en desuso, manteniendo al máximo sus características como zona verde».
el proyecto. El objetivo general de este proyecto municipal es completar el pasillo verde existente a lo largo de la ciudad. Cuatro son las actuaciones que el proyecto plantea. La primera es la construcción de un paseo peatonal y un carril-bici desde las inmediaciones de las instalaciones deportivas de Eras de Santa Marina hasta el entorno de la antigua Balastera.
La segunda es la construcción de una pasarela peatonal sobre el río Carrión, aprovechando las pilas y los estribos del antiguo puente del Ferrocarril Secundario de Castilla. La tercera, ya en la margen derecha, es la conexión de la nueva pasarela con el camino de San Román, mediante una rampa de acceso que dará continuidad al paseo peatonal y al carril-bici. Y, por último, se instalarán barandillas y mobiliario urbano, se hidrosembrarán los taludes y se procederá a la recuperación paisajística con nuevas especies arbóreas autóctonas. El plazo máximo para ejecutar esta obra es de nueve meses.