Cientos de personas tienen cada año la comarca de Guardo como destino durante sus vacaciones de Semana Santa. Bastaba con darse una vuelta por cualquiera de las calles más comerciales de la localidad para percatarse de la gran afluencia de visitantes durante el puente festivo, lo que se traduce en un mayor número de clientes en los negocios de la localidad y, con ello, un aumento notable de la facturación.
Según los datos facilitados ayer por el gremio de hostelería, muchos negocios «triplicaron» la caja esta Semana Santa con respecto a cualquier otro fin de semana. Este es el caso, por ejemplo, del restaurante El Italiano, donde su gerente, Toni Speranza, habla de que se han recuperado no solo las cifras de ventas previas a la pandemia, sino «las anteriores a la gran crisis económica de 2008». «En la situación actual no esperábamos tanta gente, ha sido una alegría. Los ciudadanos tenían muchas ganas de salir de casa y recuperar la normalidad tras la covid», apunta.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce, pues asegura que, por mucho que se venda en Semana Santa, marzo fue un mes «dramático» para el gremio de la hostelería por la fuerte subida en los precios y los ecos de la guerra en Ucrania para la economía global.
Algo más comedido se muestra Francisco Fernández, del restaurante San Francisco, que habla de una subida del 40 por ciento en la facturación. A su juicio, ha ido «bien» y reconoce que hubo «mucha gente», pero esperaba una mayor afluencia de clientes, «más aún con el buen tiempo que hizo en Guardo esos días, que es el gran aliado de la hostelería».
La Semana Santa también dejó muy buenas sensaciones en el comercio de proximidad, gracias a los hijos del pueblo que regresaron a casa durante unos días y a los vecinos temporales procedentes, principalmente, del País Vasco.
Así lo certifica la presidenta de la Asociación de Empresarios y Profesionales (AEP), Vicky Alonso, quien afirma que «ha habido mucho movimiento en la localidad y en los pueblos del entorno, y eso se ha notado en los negocios». «Después de dos años de pandemia, la gente está recuperando el ritmo de nuevo y esta Semana Santa se ha notado un fuerte incremento en comparación con las últimas», añade Alonso.
FRÓMISTA
Frómista también hizo ayer balance. Por la oficina de turismo (casa del esclusero), pasaron un total de 1.031 personas, sobre todo españoles procedentes de Madrid, País Vasco y Cantabria. Entre los extranjeros destacaron franceses, alemanes e italianos.
San Martín de Tours recibió 2.446 visitas y San Pedro 2.012. Por el Museo de Arte Sacro pasaron 481 personas y al de Vestigia, la Leyenda del Camino se acercaron 335.