Una España sin niños

EFE
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Los expertos alertan de que la crisis poscovid influirá en el descenso de nacimientos debido a barreras como el desempleo y la incertidumbre

La tasa de fecundidad nacional es una de las más bajas del mundo, con 1,2 hijos por mujer. - Foto: Marcial Guillén

La incertidumbre sobre el efecto de la COVID-19 en el embarazo, la suspensión temporal de los tratamientos de reproducción y la ruptura de parejas provocarán una reducción adicional de la fecundidad, si bien los expertos advierten que el factor más importante que incidirá en ese descenso de nacimientos será la crisis económica derivada de la pandemia.

Esta es la previsión a corto plazo que recoge el documento ¿Cómo mejorar la natalidad en España?, que ha publicado la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) y en el que las investigadoras alertan de que todo dependerá de cuánto se alargue la pandemia y esta nueva crisis económica y de las políticas sociales que se pongan en marcha.

La tasa de fecundidad nacional es actualmente de las más bajas del mundo: 1,23 hijos por mujer, destacan las autoras en el estudio, que repasan la evolución de la natalidad y analizan las políticas que podrían ayudar a mitigar el problema que este bajo nivel supone, con lo que se podría reducir la brecha con el número deseado de hijos y contribuir a la sostenibilidad del Estado de bienestar.

«El escenario más probable es el de una reducción adicional de la fecundidad derivada de la pandemia de COVID-19», pronostican las expertas, que entre las causas que generarán un «impacto visible» en el número de alumbramientos enumeran la suspensión temporal de los tratamientos de reproducción asistida, así como la inquietud por los posibles efectos del coronavirus en el embarazo y en los recién nacidos. La percepción del «limitado acceso» a los servicios de seguimiento médico del embarazo y la probabilidad de que muchas mujeres decidan posponer embarazos que habían planificado por prudencia son otros de los factores que citan las investigadoras.

 

Más divorcios

Otra circunstancia que podría reducir la natalidad es el posible aumento de ruptura de parejas debido a las tensiones que puedan haber surgido durante y después del confinamiento, sobre todo, remarcan las autoras, «cuando hay una carencia de corresponsabilidad en las tareas domésticas y de cuidado». Incluso algunas parejas con un hijo puede que «se lo piensen más» a la hora de ir a por el segundo tras haber experimentado las dificultades de trabajar, educar y cuidar en el hogar.

«Con todo, el factor más importante que seguramente incidirá es la crisis asociada a la pandemia», puesto que el previsible aumento del desempleo y de la precariedad y la incertidumbre sobre el futuro influirán negativamente en las decisiones reproductivas.