En unos momentos en los que los datos de la voraz expansión del coronavirus nos dejan muchos días sin aliento, hay otras cifras que nos hacen ver el futuro con algo más de optimismo. Y es que 73 días después de que se detectara en España el primer infectado (31 de enero), sigue habiendo pueblos en la provincia cien por cien libres de virus y contagios.

Según los datos aportados por la Consejería de Sanidad de la Junta y puesto en contacto con los 18 municipios del medio rural con más de millar de habitantes empadronados, solo tres de estas localidades están completamente vírgenes de Covid-19: Santibáñez de la Peña, Barruelo de Santullán y Baltanás. Pueblos que se han posicionado en un lugar privilegiado en el conjunto de la provincia y que son en estos momentos la envidia de Castilla y León y de todo el país. 

Lograrlo no ha sido una tarea fácil, aunque más complicado todavía está siendo mantener el contador a cero durante más de dos meses. En todos estos casos, la despoblación, el envejecimiento, la desinfección -acciones que están desarrollando el resto de las localidades con medios propios y con la ayuda de la Diputación-, junto a un poco de suerte, han sido determinantes para librarse del virus.

Pueblos libres de virus y contagiosAsí lo cree el alcalde de Santibáñez, Manuel Maza, el primero de la provincia en publicar un bando contra las visitas de los veraneantes en Semana Santa. «Nos ha cogido en una época en la que hay menos movimiento en los 13 pueblos del término municipal, porque hay muchos vecinos que pasan el invierno fuera, y eso ha ayudado bastante», asegura el primer edil, para añadir que «la zona básica de salud de Guardo, a la que pertenecemos, es la que presenta el porcentaje de infectados más bajo de Palencia y esperamos seguir así por mucho tiempo. Es la primera vez que los pueblos de la España vaciada tenemos un beneficio».