Izquierda Unida y la plataforma Recuperación del Patrimonio de Castilla y León han organizado para esta tarde, a las 19 horas, una acción reivindicativa para pedir el uso público de la iglesia y el convento de San Francisco, después de que en abril de 2018, el juzgado de primera instancia número 1 declarara esta finca de dominio público y evitara que la diócesis de Palencia inmatriculara esta edificación.

Izquierda Unida quiere pedir así que las administraciones «doten de contenido este espacio que ahora mismo está infrautilizado y se abra un diálogo para que pueda usarse con otros fines», como aseguró Juan Gascón, que señaló que se trata de 3.000 metros cuadrados ubicados en el centro de la capital y que ya en el pasado tuvo otros usos como el de escuela infantil, oficina de recaudación de tributos e incluso un cine.

La abogada de la plataforma Recuperación del Patrimonio de Castilla y León, Carmen López, quien llevó todo el expediente de inmatriculación, explicó que el papel del registrador fue clave para que la Iglesia Católica no inscribiera el convento y la iglesia a su nombre, al apreciar que una parte de esa propiedad estaba registrado a otro nombre.  «Si no es por el registrador nadie se hubiera enterado de la inmatriculación de ese bien», señaló la letrada. Además, apuntó que también hubo «errores en la delimitación» y recordó que el título que aportó la diócesis para la inmatriculación era un «autocertificado, un papel que escribió ella misma». López explicó que desde 1978, con la declaración del Estado español como aconfesional, la Ley Hipotecaria de 1946 por la que se equiparaba a la Iglesia Católica con el Estado es nula. «Una ley no puede ir en contra de la Constitución, así lo dice el Tribunal Constitucional», señaló Carmen López.

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