Los vecinos de Reinoso de Cerrato descubrieron que no tenían corriente de agua el jueves por la noche. Al día siguiente, por la tarde, un camión cisterna devolvió la normalidad a los grifos de los vecinos. Desde entonces, dos vehículos, uno por la mañana y otro por la tarde, abastecen de agua al pueblo de Reinoso. Gracias a esta medida, los vecinos no han vuelto a notar la carencia de líquido elemento en sus casas, pero sí diferencias en la presión con la que sale.
Quienes viven en la zona alta del pueblo percibieron el corte de suministro antes que el resto de sus vecinos. Dependiendo de la zona en la que esté siuada la vivienda, la fuerza del agua es mayor o menor. «Nosotros dejamos de tener agua del jueves al viernes. El resto de días hemos tenido al menos un hilillo , aunque no salga con presión», comenta Ana García, vecina de la parte baja del pueblo.
El río, a su paso por el pueblo, deja ver el fondo y la vegetación que, con el caudal habitual, no debería aparecer. Además, el hecho de que el agua no corra provoca que la maleza permanezca y que la zona termine por verse sucia. El azud colocado en el río en la zona de Reinoso se encuentra situado demasiado alto como para que el cauce actual sobrepase la edificación destinada a reconducir el paso del río. Además, este agua que queda estancada, unido a que la suciedad no se vaya, se traduce en una sobrepoblación de mosquitos en el pueblo, según relatan algunos vecinos.
La solución que ha encontrado el Ayuntamiento, por el momento, reside en esos dos camiones cisterna diarios de agua para las casas. Sin embargo, tanto el alcalde, José Luis Ayuso, como los vecinos, coinciden en que esta no es una solución viable a largo plazo. «La respuesta del Ayuntamiento fue muy rápida y hay que destacarlo, pero se trata de una sequía que va para largo y es necesaria otra solución», explica Ana García.
posibles soluciones. El alcalde defiende que están trabajando en otras formas de actuar porque ha quedado la tubería al descubierto y la cantidad de agua en la zona no es suficiente como para llegar al mínimo para su paso.
Alguna de esas alternativas, según los vecinos, podrían pasar por desembalsar más agua desde el pantano de Aguilar , por modernizar los riegos que usan parte del agua transportada en zonas anteriores a este pueblo o, incluso, por bajar esa toma de agua del azud y facilitar que, en épocas de sequía como esta, el agua corra con total normalidad.
En los últimos tiempos, las inundaciones de 2020 o las nevadas durante el temporal Filomena en 2021 provocaron que la falta de suministro de agua no se dieran en los pueblos. Sin embargo, en el 2022 se identifica, en la actualidad, por ser muy seco. Desde los ayuntamientos afectados por la falta de lluvia urgen a los vecinos a colaborar y ser responsables con el uso del agua. El Consistorio de Reinoso comenta que una cisterna de 25.000 litros llegó el viernes y cuatro horas se acabó la remesa de agua, por lo que pide a la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) que proporcione el caudal suficiente para captar agua de la estación potabilizadora (ETAP).