La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido que los mosquitos del género Aedes, que transmiten enfermedades víricas como el dengue, la chikunguña o el zika, son cada vez frecuentes en zonas del Cono Sur de Sudamérica y en el sur de Europa.
Según el jefe de la unidad del Programa Mundial de Control de Enfermedades Tropicales Desatendidas de la OMS, el doctor Raman Velayudhan, el cambio climático y el aumento de las temperaturas en estas áreas están permitiendo que los insectos se reproduzcan con más facilidad.
La OMS alertó especialmente sobre el aumento registrado en los últimos meses de 2022 y en los primeros de 2023 en el número de casos de dengue y chikunguña en países como Paraguay, Perú, Brasil o Argentina, pero apuntó a un descenso en el número de casos del virus del zika.
La responsable técnica de zika y chikunguña y codirectora de la iniciativa mundial sobre arbovirus, la doctora Diana Rojas, indicó que el incremento de casos en los países latinoamericanos podría servir de aviso a los países más meridionales de Europa como España, Francia, Italia, Grecia o Croacia.
Rojas apuntó a que las elevadas temperaturas que se registran en los países europeos en los meses de la primavera y el verano son favorables para que aumente el número de ejemplares de mosquitos en el continente.
Los expertos recordaron que, a diferencia del mosquito que transmite la malaria, los insectos del género Aedes pican a las personas a lo largo del día y no por la noche.
Además, insistieron en que los animales pueden atacar a varias personas en una misma jornada, favoreciendo así que los brotes de las enfermedades que transmiten surjan en los entornos urbanos con mayor densidad de población.
"Hemos registrado casos de chikunguña en la ciudad de Buenos Aires y en la provincia homónima, donde nunca antes los habíamos visto", apuntó la doctora Rojas, que pidió especial cuidado en entornos por los que pasan un gran número de personas como los colegios o los centros de trabajo.
En el caso del virus del zika, que llevó a la OMS a declarar la epidemia del mismo en el año 2015 como una emergencia de salud pública internacional, los expertos pidieron a la población que extreme sus precauciones a la hora de mantener relaciones sexuales, ya que el virus también se transmite por esta vía.
En la actualidad, ninguna de estas tres enfermedades provocadas por los arbovirus cuentan con vacuna, aunque los expertos de la OMS creen que éstas podrían llegar pronto si se aceleran las investigaciones.