El mundo del periodismo siempre suscita curiosidad, más aún si lo que describe son los conflictos de puertas adentro. La miniserie original de Movistar+ Reyes de la noche narra el enfrentamiento que mantuvieron dos conocidos periodistas deportivos de los años 80, donde el deporte estrella era el fútbol. Carlos Therón, conocido por películas como Es por tu bien o Lo dejo cuando quiera es el director de esta trepidante miniserie, de seis capítulos de duración, que se ofrece en esa plataforma desde este fin de semana.
¿Cómo surge la idea de trasladar a la pantalla las tensiones que ocurrían detrás de los micrófonos, durante los años 80, en un sector tan competitivo como el periodismo deportivo?
Los creadores de la serie, Adolfo Valor y Cristóbal Garrido, siempre se están peloteando ideas. El primero empezó a recordar cuando estuvo trabajando en la redacción de un programa deportivo y quedó fascinado con el ambiente y las cosas que sucedían allí. Y, buscando como adecuar esas anécdotas, encontraron que el mejor momento era el de finales de los 80 y principios de los 90, en los que la lucha por la audiencia era casi personal y encarnizada y tenía a España dividida.
Dicen que son personajes ficcionados, pero el del Condor se parece mucho, en lo profesional, a José María García, y otro tanto ocurre con su antagonista, J. Montes, que parece un calco de José Ramón de La Morena.
Hemos tomado elementos reconocibles, pero no son exactamente iguales porque los hemos llevado a nuestro mundo. Pero ese conflicto es lo que nos ayuda a entender mejor ese momento.
¿Por qué eligieron la duración de las sit comedies, de 30 minutos?
Es cierto que los capítulos duran 30 minutos, pero no estamos hablando de una comedia pura, hay elementos de drama y de thriller. El reto es que en cada capítulo pudiéramos contar algo interesante y con su propia personalidad. En este caso, la velocidad de capítulos cortos nos hacía transmitir mejor ese mundo adrenalítico y casi al borde del colapso de los periodistas intentando conseguir una exclusiva.
En el retrato que hacen sobre ciertas estrellas de radio, los presenta como egocéntricos y soberbios hasta extremos desconocidos.
Creo que todo es extrapolable a otros trabajos o empresas donde siempre existen personajes que llegan 20 minutos detrás que su ego.
El argumento tiene mucho gancho porque el fútbol también lo tiene. ¿Pensaron en esto desde el inicio?
Lo que describimos es lo que se genera alrededor de una pasión, nos interesaba contar esa guerra, y el deporte sirve como telón de fondo, pero en esa época pasaban cosas curiosas como que en una entrevista te jugabas el título de seleccionador nacional.
Por cierto, su serie describe a los periodistas deportivos como un sector muy machista. ¿Cree que hoy sigue siendo un mundo muy varonil?
Creo que si actualmente no se aprecia de forma explícita es que algo ha cambiado. Dicho esto, el personaje de Marga es una periodista ambiciosa que lucha por ocupar la franja mejor de la noche, y eso sigue vigente porque, a día de hoy, no hay una radio generalista que haya dejado ese hueco para una mujer.