El XXVII Certamen de Teatro Aficionado de Villamuriel de Cerrato llegó ayer a su fin con la entrega de premios a las distintas categorías entre las cinco obras que formaron parte de esta edición y que se han representado sobre el escenario de la Casa de Cultura Jesús Meneses desde el 19 de octubre.
El Jurado decidió entregar el premio de mejor intérprete de reparto a Inmaculada González Guillén por su papel de Cristina en la obra La señorita guardesa, de la compañía Jachas Teatro. El de mejor actriz recayó en Mariña Fernández, por su interpretación en Tartufo o el Impostor, mientras que el de mejor actor fue para Jordi Tamariz por Perlas de la compañía Stres de Quatre. En cuanto al premio a la mejor dirección fue a parar a manos de Mercedes Saíz Martínez por la obra Tartufo o el Impostor y el de mejor obra del certamen para Perlas, de Stres de Quatre. Además, el Ayuntamiento de Villamuriel de Cerrato recibió el Premio Federal al Fomento y Desarrollo del Teatro Aficionado en Castilla y León entregado por la Federación de Grupos Aficionados de Teatro de la región.
El público asistente a este certamen también tuvo un papel destacado al ser el encargado de elegir un premio con sus votos tras cada actuación y que fue para la obra Un cadáver a los postres, de la compañía Arcón de Olid.
Además, todas las compañías que formaron parte de esta edición recibieron un diploma acreditativo por su asistencia y entre los espectadores con abono se sorteó un regalo.
Antes de esta entrega de premios, los integrantes del grupo Teatro Cigarral pusieron sobre el escenario la obra Mujeres de calendario, una adaptación propia bajo la dirección de María José Sánchez. Los problemas actuales de la sociedad, como la crisis, el paro, la desigualdad en el medio rural y también los del ser humano, son los protagonistas de esta obra contada con gran sentido del humor.