Tres años y varios meses después de que el 17 de marzo de 2011 el vertedero de Valdeseñor dejara de prestar servicio activo a la comunidad (como vaso de rechazos por la ilegalidad en la que se encontraba el que acompañó al Centro de Tratamiento de Residuos), la Junta de Castilla y León publicó ayer la orden de su condena, o de su redención, según se mire.

 

El Boletín Oficial de Castilla y León recogía ayer el anuncio de la licitación del sellado del que durante 30 años fue el moledero de la capital palentina y durante varios años prestó también servicio a la provincia. Incluso, durante unas semanas, a León.

 

Un sellado que tendrá un precio de licitación de 2.064.937,14 euros, que correrán por cuenta de la Junta de Castilla y León, si bien el 80% de la cuantía irá cofinanciada por Fondos de Cohesión de la Unión Europea, según recoge texto oficial de la convocatoria.

 

Las obras para hacer desaparecer Valdeseñor y acabar con los problemas medioambientales que aún puede generar, comenzarían probablemente en el primer trimestre de 2015, y puesto que el plazo de ejecución es de 18 meses (puede ser recortado por las empresas), no estarían lista hasta la segunda mitad del año 2016.

 

Para el delegado de la Junta en Palencia, Luis Domingo González, este es un ejemplo de que el gobierno autonómico cumple los compromisos medio ambientales «una vez que Valdeseñor agotó su capacidad». Cabe recordar que  el vertedero debía haber dejado de  recibir basura de la capital poco después de que en 2006 comenzara a funcionar el CTR. Sin embargo, siguió activo, como vaso de rechazos hasta 2011. 

 

Con esta licitación, indicó González, se está a punto de acabar con todos los vertederos de la provincia puesto que «en agosto se licitó ya el sellado del de Bustillo de la Vega, con un presupuesto de 480.000 euros y está previsto que el próximo año se lleve a cabo la licitación del de Cevico de la Torre, del que ya tenemos el proyecto y que tendrá un presupuesto de unos 1.700.000 euros», señaló el delegado de la Junta. En este sentido, manifestó que en esta legislatura la Junta ha destinado o destinará algo más de 4 millones de euros a estas políticas medioambientales. «Hasta 38 millones de euros en los últimos años (más de una década) con la construcción del CTR, las plantas de Transferencia, diversos sellados...», concretó.

 

Por su parte, Alfonso Polanco, el alcalde de la capital, termino municipal en el que se encuentra Valdeseñor, destacó el buen trabajo que se lleva a cabo en Palencia con el reciclaje de la mano del Consorcio Provincial, y manifestó su satisfacción por el hecho de que finalmente se lleve a cabo el sellado de Valdeseñor. «Teníamos el compromiso de que se haría», indicó. 

 

Será además el Ayuntamiento de Palencia el que tenga que hacerse cargo durante los 30 años siguientes a la clausura de Valdeseñor de su mantenimiento y vigilancia, tal y como establece la normativa. «No sabría decir cuánto puede costar, pero no es una cifra barata», indicó José María Martínez Egea, jefe del Servicio de Medio Ambiente de la Delegación Territorial de la Junta.

Fue Martínez Egea el que reconoció que el sellado de Valdeseñor incluye varios problemas añadidos debido a los treinta años de uso.

 

Estabilidad, Gas y Lixiviados. Por un lado, la estabilidad del propio vertedero y de la montaña de basura allí depositada, cercana al millón de metros cúbicos.

 

«Se trata de un vertedero de alta densidad, debido al depósito de residuos sólidos urbanos y su compactación mecánica», señaló. Esta montaña artificial ha alcanzado tal altura que será necesario suavizar los taludes de la misma, con la formación de terrazas que fortalecerán las paredes exteriores del muro de desechos sobre el que se trabajará.

 

Otro de los problemas es la presencia de gases contaminantes e inflamables, como el metano. Este será extraído y «dependiendo de su calidad y cantidad, algo que desconocemos en la actualidad, será quemado en una antorcha, o se trasladará al CTR, donde se utilizará para cogeneración eléctrica».

 

El tercero de los problemas son los lixiviados tanto internos (producidos por la basura como los externos que o bien se dejan ver en la coronación del monte de desperdicios o bien se acumulan en su interior. Estos se recogerán, se  trasladarán a un depósito, y posteriormente se enviarán a la Estación Depuradora de Aguas Residuales de Palencia, donde se tratarán cerrando el círculo.